Las autoridades mexicanas serán llamadas a cuentas por la ciudadanía latinoamericana el próximo mes de marzo cuando se celebre el Tribunal Latinoamericano del Agua.
Esta corte de carácter ético no judicial vera 10 casos sobre violaciones al derecho al agua de los cuales por lo menos cuatro serán mexicanos anunció en conferencia de prensa Javier Bogantes, organizador del Tribunal Latinoamericano del Agua (Tragua).
La contaminación y creciente sequía del sistema Lerma Cutzamala, que tuvo el punto más alto con la protesta de las mujeres mazahuas, es uno de los casos mexicanos que podrían llegar al tribunal.
También se estudian las demandas de cinco comunidades en Puebla y Tlaxacala por la contaminación del Rió Atoyac de la industria maquiladora donde se ha padecido un alarmante número de casos de leucemia y púrpura trombósica en los pasados años.
Sobre este punto, Silke Helfrith, directora para México y Centroamérica de la fundación Heinrich Böll, destacó que en este tribunal serían las industrias demandadas y no la población afectada quienes tendrían que demostrar que sus desechos no son patógenos.
También se han enviado al Tribunal, los casos de la construcción de una marina en Zihuatanejo, Guerrero; el caso de la presa La Parota, en el mismo estado, y los derrames petroleros en el río Coatzacoalcos, por parte de PEMEX.
En la arena internacional, el coordinador científico técnico del Tragua, Danilo Antón, llamó la atención sobre un caso de minería a cielo abierto que afecta a Centroamérica, por la contaminación con cianuro y mercurio a poblaciones cercanas y la destrucción de ecosistemas, y destacó que la privatización de aguas públicas en Argentina y Bolivia contra vienen el derecho al agua.
Los integrantes del Tribunal serán nueve personalidades de la región, todas y todos de reconocida trayectoria, los cuales se darán a conocer próximamente.
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