El Plan Nacional de Desarrollo (PND) de Felipe Calderón ve a la educación desde una perspectiva mercantilista, de privatización total, lo que afectará sobre todo a las mujeres, afirmó la maestra Gabriela Delgado Ballesteros, responsable del Módulo Género y Educación en el diplomado Relaciones de género. Construyendo la equidad entre mujeres y hombres, que imparte el Programa de Estudios de Género (PUEG) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La especialista, también secretaria académica de la Facultad de Psicología, dice que la institución escolar, ya de por sí desfavorable para el desarrollo equitativo de hombres y mujeres, será menos propicia ?bajo esta óptica de Calderón- para que se dé dicha igualdad de condiciones.
Al respecto, tanto en México como en Suiza las investigaciones han encontrado que los procesos de razonamiento de mujeres y de hombres y de niñas y niños son diferentes. Y esa diferencia lleva a los mismos resultados de aprendizaje, pero a partir de diferentes estrategias.
«El problema es la institución o escuela, que califica diferencialmente a pesar de que los resultados son los mismos. Si uno mete la perspectiva de género en el análisis de los procesos que utilizan mujeres y hombres y niñas o niños, el resultado puede ser negativo como resultado, pero el proceso es adecuado y el problema es que el magisterio califica el resultado y no el proceso. Esto es el deterioro justamente de las niñas y de las mujeres.
«Cuando se ve todo lo que es parte de evaluación y los tipos de instrumentos que se utilizan para evaluar a las y los estudiantes, lo único que miden son los resultados y no los procesos. Esto va minando no la capacidad de las mujeres, sino la posibilidad de que a partir de una calificación puedan continuar en el sistema educativo, o que se les dificulte encontrar trabajo», dijo.
Además, se ha encontrado que cuando pasan de un ciclo a otro, las mujeres tienen más problemas; ya sea por roles tradicionales que las familias no les permiten continuar los estudios o por estereotipos que están marcados por una cultura patriarcal.
DESVENTAJA
El Módulo de Género y Educación que imparte la maestra Delgado en el PUEG tiene como fin analizar cómo es el sistema educativo en nuestro país, desde la perspectiva de género, y en que condición se encuentran las mujeres en este mismo sistema con relación a los hombres y a las propias políticas educativas.
– ¿Las mujeres estamos en desventaja?, se le pregunta.
«Están en desventaja en el sentido de que son evaluadas negativamente, cuando conocen los procesos, esto nos lleva a que los niños y los jóvenes utilizan una lógica instrumental y las mujeres una lógica de relación».
Pero, pese a las adversidades que encuentran las mujeres en el sistema educativo nacional, en cualquiera de los niveles, quienes tienen mejores calificaciones, a pesar de los tipos de examen, quienes terminan más rápidamente en educación media superior, con tesis, con cédula profesional, son las mujeres.
Toda mujer que logra pasar de un ciclo a otro, de primaria a secundaria, secundaria a preparatoria, es una garantía de que esa estudiante va a permanecer más que los propios hombres, además va a tener habilidades y competencias muchísimo más fuertes que los hombres tienen.
RELACIONES DESIGUALES
Otra de las cosas muy importantes que se ven en el Módulo de la maestra Delgado Ballesteros es cómo se dan las relaciones en el aula entre niñas y niños; lo que es la coeducación y lo que es la educación de las mujeres y los hombres, desde preescolar hasta el nivel superior.
Se presentan investigaciones que se han realizado en México y en el mundo sobre los contenidos educativos en el currículum oficial, los que marcan los programas de estudio, lo que hacen en el sistema las y los docentes y lo que se llama el currículum oculto.
También se abordan investigaciones con respecto al uso del poder, por parte de docentes hacia estudiantes, el que se ejerce entre hombres y mujeres, y el que usan éstos hacia el magisterio.
Los procesos de razonamiento, insistió, es otro de los temas nodales en el Módulo, es decir, de qué manera niñas, niños y jóvenes aprenden, si lo hacen desde una perspectiva memorística o a partir de procesos de razonamiento.
De igual importancia en el proceso educativo es la violencia familiar, violencia hacia la infancia, hacia las mujeres, que se detectan muy bien en la escuela o el aula. Sin embargo, no existe una relación entre el sector salud y el educativo para prevenir, atacar, remediar o incluso castigar la violencia.
ESCUELA Y FUTURO
Por eso, dice la académica, es necesario que la transversalidad de género esté en los diferentes sectores, tener la perspectiva de género no solamente en los contenidos educativos, sino en el presupuesto, en la formación y capacitación del magisterio, en la sensibilización de los poderes, eso sería la transversalización de género.
De nada sirve tener egresados en la educación, si en el mercado laboral van a encontrar una barda.
Vemos también las otras dos modalidades de la educación: no formal y la formal. Ahí abordamos los patrones de crianza, cómo la familia, en un momento dado, influye o no en cuanto a las expectativas y aspiraciones de las y los estudiantes; como la religión, a pesar de que muchas personas digan que son ateos,impactaaún en aquellos que no son creyentes.
El impacto que se tiene de la religión manejada por la familia, las creencias familiares, impiden un desarrollo íntegro de las mujeres e incluso de los hombres. En cuanto a la educación informal trabajamos todo lo que se refiere a los medios de comunicación, específicamente lo que es la televisión y la publicidad en la misma.
El Diplomado es un programa de estudios de género, en su conjunto y está compuesto por varios módulos como son: salud, educación, entre otros, y tiene como finalidad formar personal que labora en la administración pública y en los organismo no gubernamentales, para transformar sus propias actitudes y aplicar tanto ellas como ellos su perspectiva de género.
-¿Cómo se construye la perspectiva de género, maestra?
«No solamente es presentarles contenidos informales a quienes toman el Diplomado, sino ver la forma en la que ellas y ellos lo van a aplicar en las diferentes áreas ocupacionales que tienen. Por otro lado, tratar de sensibilizar a quienes toman el Diplomado de que tienen una condición de género».
Por último, señaló, el Diplomado lo toma mucha gente que trabaja en organismos no gubernamentales, antropólogos, gente que está en el magisterio, comunicadores etcétera.
Es interesante cómo se van percatando, al presentarles diferentes visiones, modelos, de que existe el currículum oculto, ese que no se ve, pero en el que encuentran todos los prejuicios, estereotipos y todo lo que tiende a ser una marginación hacia la mujer o hacia el hombre.
07/GAM/GG/CV
