La iniciativa para reformar el Código de Procedimientos e Instituciones Electorales del Distrito Federal, es un retroceso democrático porque limita la participación igualitaria y política de las mujeres en los cargos de elección popular.
De acuerdo con la diputada local, Maricela Contreras Julián, la iniciativa suscrita por los Partidos Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT), no es un avance hacia una representación de paridad en las candidaturas de las diputaciones locales, ni de las Jefaturas Delegacionales.
En un comunicado, la legisladora perredista alertó sobre el retroceso que implicaría esta propuesta, la cual, pretende derogar el Código Electoral del Distrito Federal y crear el Código de Procedimientos e Instituciones Electorales, el cual podría aprobarse en próximos días.
En opinión de Contreras Julián, con esta iniciativa –presentada el pasado 4 de noviembre en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) – ningún partido político postulará más del 50 por ciento de candidatos de un sólo género, pues se propone una fórmula del 60-40 que a decir de la diputada «en nada se justifica ante la activa participación de las mujeres en esta Ciudad».
La propuesta, que ahora se encuentra en la Comisión de Asuntos Político Electorales, señala en su artículo 299 que en las candidaturas a diputados por el principio de mayoría relativa y a las Jefaturas Delegacionales, no se podrán registrar más de 60 por ciento de candidatos propietarios de un mismo género.
Esto quiere decir que «no se atreven a avanzar hacia el 50 por ciento, no es concesión de algún partido político, se trata de reconocer y conquistar derechos», afirmó la legisladora, quien recordó que en la Ciudad de México habitan 4.5 millones de mujeres y 4.1 millones de hombres, por lo que pidió paridad.
Contreras Julián también criticó que en el mismo artículo no se evite que cada vez que una diputada renuncie a su cargo, éste lo ocupe un hombre, pues en la redacción propuesta sólo se recomienda que «se procurare» que el suplente sea del mismo género que el propietario, sin que se establezca la obligación.
Afirmó que en el ámbito nacional e internacional, se condenan las prácticas de simulación, es decir que los partidos cubran las cuotas de género al postular a mujeres, aunque luego las obliguen a renunciar para que los cargos sean ocupados por hombres; «es inaceptable que la propuesta de nuevo Código no se atreva a prohibir esa burla», enfatizó.
La también presidenta de la Comisión de Salud, mencionó que se está ignorando una iniciativa suscrita por la mayoría de las diputadas de la ALDF de todos los grupos parlamentarios, donde se establecen criterios de paridad en el Código Electoral.
Precisó que en esta iniciativa se propuso que se destinara el dos por ciento del financiamiento público ordinario de los partidos políticos para el desarrollo del liderazgo de las mujeres; sin embargo, en lo que sería el nuevo artículo 222 se habla de 3 por ciento para la generación y fortalecimiento de liderazgos femeninos y juveniles.
«En todo caso, deberían aumentar el porcentaje, ya que se trata de dos sectores con necesidades diferentes que debemos impulsar», afirmó.
Finalmente, la legisladora precisó que «no existe explicación ni argumento, más que la cultura machista y una profunda convicción de negar la participación de las mujeres en igualdad de condiciones para no establecer la paridad de género en el nuevo Código Electoral».
Anunció que de no corregirse lo que llamó «verdaderos retrocesos democráticos» en la Ciudad de México, llamará a votar en contra del dictamen que resulte de dicha iniciativa, «por tratarse de un atentado contra los derechos políticos de las mujeres», sentenció.
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