El pasado 8 de octubre el Parlamento del estado de Victoria, en Australia meridional, aprobó una nueva ley de aborto voluntario dentro de las 24 semanas de gestación y, bajo ciertas condiciones, hasta el momento del nacimiento, informaron agencias internacionales. Dicha ley también prevé la desaparición del derecho a la objeción de ginecólogos.
Las declaraciones que hicieron en 2004 las líderes feministas como Wendy McCarthy y Eva Cox, entre las más conocidas en Australia, sobre la necesidad de que debiera reconsiderarse el límite legal que permite la interrupción del embarazo (ILE) en Australia, fueron recibidas entonces como un paso significativo para que hubiera un cambió radical sobre el tema en su país.
Y hoy, a cuatro años de estas declaraciones, en Victoria, el estado más pequeño de Australia con alrededor de 5 millones de habitantes, la ley permite ya la ILE hasta las 24 semanas de gestación.
Cabe resaltar que el pasado 4 de junio, el Secretario de Ayuda Internacional al Desarrollo, Bob McMullan, consideró necesario que el Parlamento australiano estudiara la eliminación de prohibición para financiar los servicios de ILE en la ayuda destinada a naciones en vía de desarrollo, impuesta hace doce años por el anterior gobierno conservador de John Howard, informó la agencia EFE.
El debate pondrá en una difícil situación al nuevo primer ministro, el laborista Kevin Rudd, un anglicano practicante que venció en las últimas elecciones con el apoyo de gran parte de los cristianos, que se manifiestan en contra de la ILE.
En Australia se practican unos 100 mil abortos cada año. La interrupción del embarazo es legal siempre que sea para proteger la salud de la mujer, aunque se dan supuestos específicos en cada uno de los estados que integran la Federación de Australia, (caso específico la ley aprobada en Victoria) y en algunos de los cuales es posible acceder a subsidios para abortar.
La Iglesia respondió a la reciente modificación de la ILE con una marcha por las calles de Melbourne, capital de victoria, convocada por el arzobispo de Melbourne, Denis Hart, informó la agencia Fides.
Por otra parte, un grupo de médicos, a través de su página de Internet LiveSiteNews, mostraron su desacuerdo porque la ley sobre ILE no reconoce la objeción de conciencia de los médicos y personal sanitario, derecho que está reconocido por la mayoría de los profesionales de la salud, incluida la Asociación Médica de Australia y la Real Escuela Australiana de Enfermería.
Más de cien médicos pidieron por eso rechazar la ley y advirtieron que los hospitales católicos tendrán que cerrar sus puertas antes de cumplir la ley.
ABORTO POR SALUD MENTAL
En el tema de la ILE mucho se ha avanzado en Europa Occidenta, pues mientras en 1975 los países de esa región tenían leyes restrictivas respecto al aborto, ahora existen casos como el de Australia, afirma la página de Internet aborto.com.
Por su parte, The center for reproductive Rights indica que en países como Australia, Botswana, España, Israel y Portugal el aborto está permitido por razones de salud mental. Las leyes en los países que reconocen esta legislación, que constituyen aproximadamente el 3.4 por ciento de la población mundial, sostienen que estos países ven de distinta forma las razones de salud mental.
Considera dicho Centro que algunas de las razones pueden abarcar la angustia psicológica que sufre una mujer que ha sido violada, la angustia mental provocada por circunstancias socioeconómicas, o la angustia psicológica de una mujer ante la opinión médica de que el feto se halla en riesgo de haber sido perjudicado.
Los países ubicados en esta categoría de permitir el aborto por razones de salud mental también autorizan el aborto en casos de violación, incesto o de malformaciones fetales.
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