Defensoras de los derechos femeninos en el estado de Guerrero demandaron una reforma al Código Penal local, para que el delito de feminicidio contemple los asesinatos de mujeres cometidos por el crimen organizado.
La ex diputada local e integrante del Colectivo Nosotras, María Luisa Garfías Marín, dijo que organizaciones civiles en la entidad alistan una propuesta de reforma a la legislación penal que se enviará al nuevo Congreso local, que rinde protesta el próximo 13 de septiembre.
«Nosotras queremos que se integren los homicidios de mujeres por parte de la delincuencia organizada a los casos de feminicidio, porque en ocasiones las matan sólo por ser parejas de determinadas personas aunque no tengan nada que ver con esos grupos delictivos», abundó la también activista de la red defensora de los Derechos Humanos de las mujeres «La Madeja».
Agregó que también hay casos en los que las matan no por pertenecer a algún grupo delictivo, sino por el simple hecho de ser familiar de alguno de los criminales.
«Lo más lamentable de todo es que muchas de ellas son madres y otras son cabeza de familia, y dejan a sus hijos e hijas en la orfandad, por lo que se genera un problema social mayor», observó Garfias Marín.
La Comisión Especial del Feminicidio de la Cámara de Diputados ha reportado que hasta marzo pasado se registraron 115 muertes violentas de mujeres en Guerrero. Hasta ese momento el estado ocupaba el cuarto lugar a nivel nacional en casos de feminicidio, y el puerto de Acapulco se ubicó en el primer lugar en la entidad por la incidencia de asesinatos de mujeres.
En octubre de 2009, el entonces gobernador Zeferino Torreblanca envió una iniciativa al Congreso estatal para reformar el Código Penal de Guerrero y tipificar el feminicidio como delito grave. La reforma se aprobó en diciembre de 2010, por lo que se convirtió en el primer estado en tipificar este crimen.
Se definió al feminicidio como la violencia extrema hacia las mujeres y debe realizarse con misoginia (odio al género femenino). Se castiga con 30 a 50 años de cárcel.
No obstante, María Luisa Garfías Marín consideró que no hay claridad en la definición del delito, por lo que organizaciones civiles impulsarán una nueva reforma para fijar el concepto y se castigue a los responsables con las penas correspondientes.
La ex legisladora indicó que no es fácil comprobar cuando la muerte violenta de una mujer es feminicidio.
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