Al término de una conferencia de prensa en la que el mexicano, Joaquín Aguilar Méndez, dio a conocer hoy aquí la demanda contra el Cardenal, Norberto Rivera Carrera por encubrimiento a un pederasta entre otros delitos, un grupo de personas al parecer del Instituto Nacional de Migración, trataron con empujones de llevarse a los abogados norteamericanos del demandante.
Al ser interrogados por las reporteras de diferentes medios, sobre la causa de esta acción, los presuntos agentes, que nunca se identificaron, se vieron obligados a mostrar un citatorio para los abogados a fin de que se presenten a las oficinas de migración en un lapso de 5 días a partir de hoy.
Personal de seguridad que acompañaba a Aguilar Méndez llamó a la embajada de Estados Unidos para pedir ayuda y les recomendaron llamar a la policía del distrito federal.
Una patrulla con varios elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) llegó al hotel donde se llevó a cabo la conferencia y constataron que la camioneta del supuesto personal de migración no llevaba placas, y en ella viajaban al menos dos personas.
Posteriormente, Aguilar Méndez dijo que teme por su seguridad y la de su familia, que este hecho fue resultado de la demanda que interpuso contra el Cardenal Rivera Carrera y «si fueron capaces de intimidar a los abogados, no me quiero imaginar lo que me pueda pasar a mí o a mi familia».
Por su parte, el abogado Jeff Anderson declaró que existe un grave programa al interior del clero mexicano y que él no tiene mayor preocupación por lo que pueda sucederle a su persona, «sino por las niñas y niños de la República Mexicana»
En la conferencia de prensa, Aguilar Méndez y sus abogados Jeff Anderson y Vans Owen, denunciaron que El Cardenal Rivera Carrera es culpable de conspiración internacional civil por la protección del pederasta, Nicolás Aguilar Rivera, pues además el Cardenal «tenía conocimiento de estos problemas, señaló Owen.
Los delitos por los que se acusa a Rivera Carrera son: negligencia, complot civil, fallo en no advertir de manera pública acerca del peligro que el pederasta representaba, molestia emocional de la víctima y asalto sexual por ser jefe de quien cometió el hecho en forma material.
Las pruebas que serán presentadas en contra del Cardenal son
cartas entre él y el Arzobispo Roger Mahoney, así como grabaciones de llamadas telefónicas, además de reportes policíacos de los Ángeles y testigos, entre otras, precisó el abogado Vans Owen.
Aguilar Méndez, de 25 años de edad, declaró haber sido violado por el sacerdote Nicolás Aguilar Rivera en la Iglesia de San Antonio de Padua de las Huertas hace 12 años cuando era monaguillo y aunque el acto fue denunciado en su momento, «la autoridad no encontró pruebas suficientes», para hacer justicia.
Actualmente, Aguilar Méndez es integrante de la Red de Sobrevivientes de abusos sexuales de sacerdotes (SNAP por sus siglas en inglés) y cuyo representante en México, Erick Barragán también fue abusado sexualmente por un sacerdote católico.
La Red tiene su sede en la ciudad de California, Estados Unidos y su teléfono para mayor información y apoyo en este tipo de casos es 01 800 821 05 99.
06/BH/LR
