Prevén que para el próximo mes de abril se presente y apruebe una nueva ley de medios de comunicación, en la Cámara de Senadores, que contemple el derecho humano de las mujeres a la comunicación e información, señaló la doctora en comunicación y periodismo, Aimée Vega Montiel, durante la mesa Género, democracia y derecho a la información: en torno a la ley de medios.
Dicha iniciativa se llevará al Grupo Plural del Congreso, integrado por representantes de los distintos partidos políticos para después, se espera, ser aprobado por la Cámara Alta, adelantó la también integrante de Asociación Mexicana de Derecho a la Información (AMEDI).
Vega Montiel mencionó que entre las puntualizaciones que se incluirán en la iniciativa de la nueva ley de medios está contemplar la comunicación e información como un derecho fundamental de las mujeres, el empleo de un lenguaje no sexista y suprimir las imágenes degradantes de las mujeres como objetos sexuales o roles tradicionales.
Asimismo, la comunicóloga explicó que en los medios masivos de comunicación, actualmente y desde los años setenta, se reproducen estereotipos sexistas de las mujeres, que las asocian a roles tradicionales, como esposas o amas de casa, que enfatizan su supuesta fragilidad y vulnerabilidad.
Las mujeres en los medios son además representadas como objetos sexuales, «no existe interés en visibilizar el papel de la mujer y su poder social como agentes en la esfera política, económica y cultural», afirma la especialista.
De acuerdo con el Global Media Monitor Project 2001, estudio realizado en 71 países simultáneamente durante un día, citado por Vega Montiel, en el que se investigaron los patrones de género prevalecientes en los contenidos de noticieros, los resultaron indicaron que el 19 por ciento de las protagonistas de las transmisiones son mujeres y de ellas «la mayoría era objeto de cobertura sensacionalista, sondeos, víctimas madres o esposas, pero no como protagonistas de la dinámica política y social.
En tanto, los hombres aparecen como protagonistas en el 81 por ciento restante, en su mayoría, en los roles de políticos, empresarios y deportistas.
De igual forma, el estudio registró un aumento de violencia y discriminación contra mujeres y niñas, contenidos de pornografía y prostitución en medios tradicionales y nuevas tecnologías como Internet.
«La responsabilidad de los medios en la reproducción de los prejuicios y prácticas discriminatorias que contra las mujeres prevalecen en la sociedad, continúa siendo una asignatura pendiente», pues teniendo como marco la existencia de organismos jurídicos para eliminar la violencia de género y la Ley General de acceso a las mujeres a una vida libre de violencia en México, es posible erradicar la agresión mediática contra las niñas y mujeres a través de la transformación de sus contenidos.
Asimismo, Vega Montiel mencionó que con esta demanda se espera «mirar a las mujeres reales en los medios, en su subjetividad y como protagonistas de la acción social».
La también docente de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) denunció que las mujeres ocupan una lugar marginado en los medios de comunicación, como propietarias «son casi inexistentes».
Al respecto, Estados Unidos, considerado el país donde hay más propietarias o accionistas de empresas de comunicación, las mujeres ocupan el 9 por ciento de este ámbito.
El nivel en donde figuran más mujeres es el de creadoras, reporteras y editoras, sin embargo la cifra global no alcanza el 25 por ciento, afirma la experta en medios.
Las mujeres que trabajan en las empresas de comunicación se enfrentan a problemas que obstaculizan su desarrollo laboral como el acoso sexual, las prácticas de trabajo, que obligan a las mujeres a asumir rutinas creadas para los hombres en términos de fuentes a cubrir, espacios y horarios, la desigualdad en reconocimiento y remuneración académica de su trabajo, señaló.
Por último, la especialista concluyó que la comunicación es un derecho humano y esencial de las mujeres, indispensable para lograr la paz mundial.
08/GCJ/GG
