Es «vergonzoso que la Cámara de Diputados no se haya manifestado por la violación a la soberanía que hizo el gobierno de Álvaro Uribe a Ecuador y que dio como resultado una masacre en contra de integrantes de la guerrilla colombiana y personas mexicanas que se encontraban en ese campamento», denunció la diputada perredista Maricela Contreras.
A casi un mes del ataque perpetrado por el Ejército colombiano a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en territorio ecuatoriano, la Cámara de Diputados «no se ha hecho un espacio para que nos pronunciemos en contra de estos hechos lamentables», señaló en un boletín de prensa.
La legisladora perredista agregó que ante el conflicto regional desatado por la incursión militar de Colombia en territorio ecuatoriano, las y los legisladores deberían condenar estos hechos que sólo dan pie al intervencionismo y alientan el hambre bélica de los Estados Unidos.
Para Contreras Julián, actual presidenta de la Comisión de Equidad y Género, el ataque del Ejército colombiano sobre las FARC dentro de territorio ecuatoriano es, «a todas luces una violación flagrante a la soberanía de este país hermano; hecho en sí mismo condenable, ya que ha puesto en riesgo la tradición de relaciones pacíficas entre las Naciones a las cuales nos une una historia y cultura en común».
En su opinión esta condena es más enérgica cuando ha cobrado la vida de personas, entre las que se encontraban estudiantes y profesores mexicanos; además de resultar herida Lucía Andrea Morett Álvarez, quien «de manera valiente y digna nos ha dado a conocer los pormenores del ataque premeditado por el Ejército colombiano».
Por otra parte, la diputada señaló que hay un hecho particular que provocó un «escándalo mediático», más que el artero asesinato de miembros de las FARC y de connacionales: «la presencia de personas mexicanas que se encontraban en el lugar del ataque, las cuales han sido juzgadas por su forma de pensar y línea ideológica».
Contreras Julián comentó que el hecho, que se ha ventilado en los medios de comunicación, ha tachado a las personas fallecidas y a Lucía Morret como miembros de la guerrilla colombiana y ha sido el pretexto para emprender una campaña en contra de la Universidad Nacional Autónoma de México señalándola prácticamente como semillero de guerrilleros.
Recordó que esos señalamientos son similares a los que se escuchaban contra el movimiento estudiantil del 68, «cuando se decía por parte de las autoridades que eran los enemigos de México».
Por ello, aseguró que «la Cámara de Diputados tiene la responsabilidad de fortalecer a las instituciones de nuestro país y más a las que tienen que ver con las tareas educativas y académicas de miles de mexicanas y mexicanos, como lo es Nuestra Máxima Casa de Estudios».
Por lo que vamos a promover que el Pleno de esta Cámara la labor de la UNAM y manifieste su rechazo en el uso equívoco de estereotipos y señalamientos que deforman su imagen, al vincular a sus estudiantes como activistas de la guerrilla colombiana., advirtió.
Finalmente, Contreras informó que el Punto de Acuerdo contempla también un resolutivo para que se brinde asistencia y asesoría a los familiares de los connacionales muertos en Ecuador a manos del Ejército colombiano.
Además de otorgar asistencia consular auténticamente comprometida con los derechos humanos y la seguridad de la herida y hospitalizada Lucía Andrea Morett Álvarez.
En el Punto de Acuerdo participan también los diputados Camerino Eleazar Márquez Madrid, Adriana Díaz Contreras, Juan N. Guerra Ochoa, Cuauhtémoc Sandoval Ramírez y Jesús Humberto Zazueta Aguilar, compañeros de la bancada perredista.
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