El avance electoral de José Reyes Baeza, virtual ganador de la contienda electoral que se desarrolló en Chihuahua el pasado 4 de julio, se da en medio de una lluvia de «dimes y diretes» entre el actual mandatario priista, Patricio Martínez, y su antecesor el panista Francisco Barrio, acerca de las presuntas responsabilidades y negligencias de ambas administraciones en las investigaciones referentes a los homicidios de mujeres que ocurren en Ciudad Juárez y Chihuahua.
Apenas ayer el gobernador Patricio Martínez acusó a la administración de Barrio de ineptitud, y evadió toda responsabilidad al llamar a las mujeres asesinadas «las muertas de Barrio», a quienes, de acuerdo a Martínez, las habría dejado «en bolsas, revolcándose en sus tumbas», y desde donde «reclaman justicia».
Las cifras oficiales revelan que durante la actual gubernatura se han registrado 173 casos de mujeres asesinadas y/o desaparecidas, de un total de 258 registradas en ambas administraciones.
En tanto que el día de hoy, el actual coordinador de la fracción parlamentaria del Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados y ex gobernador de la entidad, Francisco Barrio tildó de «loco y sicológicamente desajustado, al actual mandatario, de quien, dijo «anda en busca de culpables».
Barrio Terrazas negó que los crímenes de Ciudad Juárez y Chihuahua sean «las muertas de Barrio» y acusó al actual mandatario chihuahuense de eludir su responsabilidad por la «incapacidad» que tiene para resolver el problema.
Refirió que durante su administración (1992 a 1998), se registraron aproximadamente 90 casos de mujeres asesinadas, y que las mismas fueron resueltas en dos terceras partes, además de que «siempre salí a dar la cara a la sociedad y enfrentar el problema con responsabilidad».
Mientras tanto, Luz Estela Castro, abogada de la organización no gubernamental Justicia para Nuestras Hijas, opinó vía telefónica que «no son las muertas ni de Barrio ni de Martínez, sino que las asesinadas son del Estado como institución, que no ha sabido resolver ni dar seguridad a las mujeres de Ciudad Juárez».
«Y cuando digo Estado me refiero al Estado federal, estatal y municipal», señaló la activista en derechos humanos.
Entretanto, el virtual mandatario en la entidad José Reyes Baeza se ha comprometido en diversos medios a resolver el feminicidio en Chihuahua, no obstante haberlo ignorado en su campaña por «no politizarlo», cuestión ampliamente interpretada por las ONG como desinterés y falta de compromiso de su parte.
Según cifras de Amnistía Internacional (AI), el mayor organismo defensor de los derechos humanos del mundo, 370 mujeres han sido asesinadas en Ciudad Juárez de 1993 a la fecha, aunque la Procuraduría General de la República (PGR), admite 258 y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), establece en cuatro mil el número de desaparecidas.
2004/BJ/GV/SM
