El panorama de las niñas y niños guatemaltecos durante el 2003 fue poco alentador. Entre las situaciones que padeció está la desnutrición agravada en 60 mil casos, 43 por ciento de incremento de la violencia, aumento del robo para adopciones ilegales y el registro de 544 casos de VIH/Sida, señala un informe preliminar de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado (ODHAG).
La investigación tiene como objetivo dar a conocer a la población la situación en todos los ámbitos sociales de las niñas, niños y las y los adolescentes, así como fiscalizar las acciones que el gobierno promovió, para el desarrollo de los infantes en Guatemala.
No obstante, Carlos Alarcón, coordinador del área de Cultura de Paz del Arzobispado, dijo que las campañas promovidas por el Estado, «Salvemos Primero Primaria» y «La Maratón del Lápiz», no resolverán un problema de valores que enfrentan los adultos y que corrompe la mente de los pequeños, hechos que dan como resultado el trabajo prematuro, la participación en las maras y la deserción de los estudios.
El informe, que tiene como base un monitoreo hemerográfico, reveló que los hechos violentos, el maltrato físico y psicológico y la explotación sexual, son flagelos prevalecientes en la ciudadanía, sin que el Estado promueva políticas encaminadas al desarrollo integral de la niñez.
Por su parte, Claudia Agreda, defensora de la niñez de la ODHAG, declaró que hace falta mucho trabajo de la sociedad civil y el Estado, para cambiar la situación de los infantes.
Las violaciones sexuales son un tema tabú para los padres; las adopciones no tienen seguimiento en aquellos menores que están fuera del país; la desnutrición afecta a los más pequeños, sobre todo en comunidades indígenas y no hay un sistema confiable de denuncia, resaltó.
Deben fortalecerse los programas de educación de la niñez, pero también incluir a los padres; erradicar la pobreza y garantizar la supervivencia de los olvidados, sobre todo en las comunidades indígenas del área rural y asignar más fondos para la salud, expresó la defensora.
Según el resumen estadístico del informe «Situación de la niñez en Guatemala 2003», el homicidio de menores aumentó un 34 por ciento, representado en 639 muertes; durante el 2002 ocurrieron 351.
Además, 422 infantes sufrieron maltrato y violencia emocional, según las denuncias presentadas en la Fiscalía de la Mujer y el Juzgado Primero de la Niñez y Adolescencia.
El Programa de Salud Reproductiva del Ministerio de Salud, reveló datos de mortalidad infantil, los cuales indican que por cada mil nacidos, fallecen 29 en el área urbana y 44 en la rural.
Según el «Análisis de la situación de Seguridad Alimentaria Nutricional» de Guatemala realizado por las Naciones Unidas, los niños k´ichés, queqchíes, kaqchiqueles y mames, representados en un 9.7 por ciento de la población infantil sufre adelgazamiento severo por la desnutrición.
2004/GV/SM
