Por incurrir en «actividades ilegales», la periodista estadounidense Roxana Saberi fue detenida en Irán, informó un vocero de ese país que señala que la detenida seguía trabajando en el país a pesar de que el gobierno le revocó sus credenciales de prensa en el 2006, dijo el lunes pasado la cancillería.
La agencia de noticias AP logró en Irán que el vocero del ministerio del exterior, Hasan Qashqavi, informará lo anterior, aunque no especificó los motivos de la anulación de las credenciales de Roxana Saberi y se negó a decir si la periodista estaba encarcelada.
La anterior respuesta a la agencia internacional se da luego de que el padre de Saberi, Reza, reportara que el domingo su hija, de 31 años, le comunicó el 10 de febrero que fue detenida, luego de comprar una botella de vino, lo cual es ilegal en Irán. Desde entonces no supo más de su hija.
Roxana Saberi es una periodista que ha colaborado con National Public Radio de Estados Unidos y otros medios de comunicación. Ha vivido seis años en Irán.
No hemos sabido nada, dijo Reza a Associated Press en la ciudad estadounidense de Fargo en Dakota del Norte. La familia decidió hablar en público, agregó, porque deseamos recibir algo de información.
Un funcionario del Departamento de Estado de Estados Unidos dijo el domingo se estudiaba una solicitud hecha por la AP para obtener información del caso.
Los grupos de derechos humanos han criticado reiteradamente a Irán por arrestar a periodistas y suprimir la libertad de expresión. El gobierno ha arrestado a varios irano-estadounidenses en años anteriores con el argumento de intentaban derrocar su régimen islámico. El caso más sonado ocurrió en el 2007, cuando Irán aprehendió a cuatro irano-estadounidenses, incluida la académica Haleh Esfandiari. Los cuatro estuvieron detenidos o se les confiscaron sus pasaportes por varios meses hasta que salieron en libertad y regresaron a Estados Unidos.
(Roxana) llamo desde un lugar no revelado y dijo que había sido detenida, expresó su padre sobre la llamada telefónica. Indicó que en ese momento ya llevaba 10 días arrestada.
Relato que había comprado una botella de vino y la persona que se la vendió la había denunciado y vinieron a arrestarla, añadió. La compra y venta de alcohol es ilegal en la República islámica.
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