La discriminación de las mujeres en el mercado de trabajo las mantiene en las categorías más bajas y menos remuneradas dentro de los puestos laborales, ubicándolas entre la población más pobre del país.
A ese oscuro panorama laboral, se suma su precaria situación económica lo que repercute directamente en su salud física y emocional, coincidieron especialistas y obreras en el programa radiofónico, Público y Privado, primera producción radiofónica de Cimacnoticias.
Las jornadas laborales de las mujeres no coinciden con sus actividades dedicadas a la familia, ni a los hijos por lo que es necesario trabajar más en este tema y legislar por modelos laborales más justos, explicaron.
Transmitido todos los lunes de nueve a diez de la mañana por el 1350 de la XEQK de Amplitud Modulada, las participantes analizaron la situación laboral que enfrentan las mujeres trabajadoras.
Yaucalli Mancillas del Centro de Reflexión y Acción Laboral (CEREAL), aseguró que la política actual de empleo para las mujeres está en crisis, y prevalece una gran vulnerabilidad hacia las y los egresados de las universidades, pues al finalizar sus estudios no encuentran trabajo.
Ello, dijo, según el resultado de un estudio sobre los derechos laborales en México realizado por CEREAL, donde se desprende además un aumento de la población femenina a la economía informal, como vendedoras ambulantes, carentes de todo tipo de apoyo.
Mancillas, precisó que el autoempleo se incrementa entre las y los mexicanos, siendo las mujeres las que más engruesan las filas de la economía informal, por lo que persiste la «doble jornada» (trabajo doméstico y trabajo fuera de casa) para la población femenina.
Aunado a ello está la disminución de los contratos colectivos en las empresas, que resta protección y prestaciones a las y los empleados.
300 tornillos diarios y sólo media hora de comida: jornada diaria de la empresa de tornillos Spasser.
Un claro caso de esta situación se vive en la empresa de tornillos Spasser (a la fecha con 6 meses en huelga por distintos abusos), anteriormente encabezada por Enrique Bergman y heredada a su hijo, en cuyo mando iniciaron todo tipo de abusos e irregularidades hacia las obreras.
Tras denunciar la mutilación de algunos dedos en sus compañeras durante la fabricación de tornillos, Ernestina Cerrillo León e Isabel Salinas Jaramillo, (invitadas al programa radiofónico Público y Privado), están en espera de un pago justo a sus más de 30 años laborales.
Dijeron que fueron los abusos físicos y emocionales en Spasser los que orillaron a ellas y sus compañeras a irse a la huelga, amen de la inhalación de gases tóxicos. Actualmente la respuesta de las autoridades es nula.
A pesar de las diversas recomendaciones al gobierno mexicano en materia de salud por parte del Alto Comisionado de la ONU para que en las empresas otorguen condiciones laborales sanas a obreras y obreros, estas acciones se han quedado sólo en una buena voluntad, pues la realidad continúa afectando gravemente a la población trabajadora, señaló Mancillas.
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