Los alimentos transgénicos son organismos manipulados genéticamente en laboratorios. Además de su patrimonio genético natural poseen genes de otros organismos que les ocasionan modificaciones transmisibles a su descendencia.
La hipótesis de que los alimentos transgénicos ayudarían a combatir el hambre en el mundo constituye desde 1983, año en que se estableció la primera planta transgénica, uno de los debates más polémicos hasta principios del siglo XXI.
Importantes organizaciones como la de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), defienden la ingeniería genética aplicada a la producción agrícola, argumentando que constituye una posibilidad para acabar con el hambre que padecen millones de personas en el mundo.
Sin embargo, antes de pensar en reglamentar el uso de alimentos transgénicos para combatir el hambre, se deben tomar en cuenta consideraciones que diversos investigadores han señalado.
En primer lugar, la problemática del hambre en el mundo no reside en la falta de alimentos, sino en la poca y a veces nula capacidad para adquirirlos, es decir, no es un problema de producción agrícola: es una cuestión política.
Por otro lado, los desequilibrios que provocarían los alimentos transgénicos en el medio ambiente, lejos de erradicar el hambre y la pobreza los acrecentarían. Si los transgénicos se mezclan con otras plantas por la polinización resultarían especies estériles, sin posibilidades de reproducirse. Si esa mezcla ocurre con plantas dañinas el efecto sería mucho más serio, ya que las haría resistentes a los plaguicidas.
Existe además el riego de que los alimentos transgénicos eliminen las semillas naturales, y se conviertan en alimentos totalmente químicos.
Un estudio realizado por el Centro de Investigaciones en Bioética y Salud Pública de Universidad de Santiago de Chile, señala que la reglamentación del uso de alimentos transgénicos de ninguna manera constituye una herramienta para combatir el hambre, por el contrario, favorecería la posibilidad de que los grandes monopolios fabricantes de alimentos controlen el acceso a los mismos.
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