Elvira Arellano corre el peligro de ser arrestada en cualquier momento. Ella misma lo informa: En la madrugada de anteayer y, de acuerdo con informes de los vecinos, agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) fueron visto tomando fotografías de los accesos a la Iglesia Unida Metodista Adalberto, del barrio de Humboldt Park, en el norte de Chicago, donde ella se refugia.
«Es el procedimiento rutinario para buscar a los fugitivos de la justicia. Investiga y después arresta. Siempre lo hacen en horas de la madrugada», explica.
Desde hace cuatro meses, la mexicana Elvira Arellano se encuentra refugiada en esa iglesia y ante el peligro de ser arrestada, exclama: ?Todo se lo dejo a Dios. Dios no puso fronteras. Todos somos sus hijos. No soy diferente de Bush ni de los congresistas o senadores. Dios nos ama a todos».
«Dios sabe que viene a este país a trabajar para ayudar a mis padres y a mi hijo».
Todos los días, lee su Biblia, especialmente el Libro de los Salmos: «Antes de acostarme le pido que me perdone mis pecados. El es grande y misericordioso. Le pido por mí, por mi hijo y todos. En nombre sea de Dios?.
Su estadía en este país, se la deja a Dios: «Que sea la voluntad de él?, dice convencida.
Elvira Arellano explicó a Cimacnoticias que los llamados de ayuda e intervención que hicieron al gobierno mexicano no tuvieron respuesta por parte del expresidente Vicente Fox, pero si hubo reacción luego de la visita que hiciera su hijo Saúl a México.
Espera que a principios de enero del 2007 una delegación de diputados se entreviste con sus similares en Washington para tratar su caso.
Sin embargo, las visitas que su hijo ha hecho en compañía de otros pequeños a Washington, para pedir por millones de familias que corren el peligro de deportaciones y de separación de familias, han tenido nula respuesta. Incluso, no les han querido recibir las misivas que le llevan al presidente George Bush.
Pero fija sus esperanzas en que la legalización de trabajadores indocumentados traiga consigo enmiendas a la ley, que la beneficien a ella y a millones de familias. «Millones de familias ya están separadas y sufren castigos de 10 a 20 años para poder reunificarse. Otras como yo corremos a diario el peligro de la deportación».
«La ley migratoria es injusta, eso es muy triste. Tiene que cambiar?», reflexiona, pero vuelve súbitamente a su preocupación más inmediata: «los agentes de migración dicen «no la vamos a detener», pero lo cierto es que actúan cuando quieren».
El caso de Arellano ha tenido mucha publicidad en todos los medios de comunicación, como el New York Times o la revista Time de la semana pasada, también en las publicaciones de espectáculos, donde comparte portada con Salma Hayek en Latina magazine, y hasta en Europa.
«La verdad la publicidad nos ha ayudado mucho. A todos los que requerimos de la legalización. Estamos cerca del cambio. Bendito sea Dios».
Ella subraya: «no soy criminal, el gobierno así nos llama y nos trata. Además nos discrimina. Somos gente que venimos a trabajar y por un futuro mejor».
También se refieren a ella como fugitiva.
– ¿Qué sientes?, le pregunto.
– Al principio me sentía mal, por mis papás, que miraban noticias y todo eso. Pero, para Dios no soy fugitiva, soy su hija y me ama. Y hoy, por el contrario me hace sentir más fuerte.
Cabe destacar que Arellano pertenece al Centro sin Fronteras y participa activamente en la iniciativa de Familias Latinas Unidas.
El propósito que tiene para el nuevo año es poder salir de la iglesia, para seguir luchando. Ir a Washington y alcanzar la legalización de ella y de los 12 millones de trabajadores y trabajadoras indocumentadas.
«Quiera Dios que antes del verano obtengamos la legalización. Eso es muy importante. Porque después será muy difícil, ya que todo mundo le pondrá atención a la campaña presidencial del 2008 y se olvidarían de nosotros», acota.
Y lo más importante que se debería obtener en este momento es la moratoria a las redadas y deportaciones. «La separación de las familias es desastrosa»?
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