México DF, 12 junio 07 (CIMAC).- Es la víspera de su Homenaje Nacional en el Palacio de Bellas Artes y Frida Kahlo se revela otra vez: ahora, junto a sus costosos autorretratos aparecen también las pequeñas fotos, donde silba o se ríe fuerte.
Este miércoles por la noche se inaugura el homenaje al icono mexicano en el centenario de su nacimiento, en una exposición que ocupará todas las salas de Bellas Artes para que un mínimo de 300 mil personas vean más de 354 obras de la pintora y también nuevas fotos y cartas.
De las 8 salas que contienen la exposición, un paseo por su creación y su vida personal, la sala David Alfaro Siqueiros y la sala Jorge González Camarena cuentan la vida de Frida Kahlo en fotografías.
En una, sus retratos hechos por figuras como Dolores Álvarez Bravo, es la Frida que sabe posar, explica Cristina Kahlo, una de cinco curadores de la exposición.
La segunda, «tiene una intención íntima», agrega la sobrina-nieta de la artista «por eso son pequeñas. Mientras la también fotógrafa muestra el legado de su bisabuelo Guillermo Kahlo, abunda en que esta sala representa un álbum de familia.
Hay retratos de «fotógrafos populares de la Alameda? hay una Frida más terrenal comiendo en el piso o chiflando en Xochimilco.»
Cristina Kahlo, hija de fotógrafo también, recalca que Frida aprende el autorretrato de su padre, quien también acostumbraba a tomarse fotos. Y a retratar a Frida y a sus hijas. Por ello, «cuando ya es una artista más o menos reconocida?. Ella sabe muy bien qué es posar.»
Una foto en la exhibición que Cristina Kahlo marca como muy interesante es «Frida es con traje» tomada el 7 de febrero de 1926 por Guillermo Kahlo porque la joven de 19 años aparece vestida con un traje varonil en el escenario de una típica foto familiar. Quiere marcar una diferencia.
Este es apenas uno de los aspectos de Magdalena Carmen Frida Kahlo y Calderón que se pueden observar a partir de mañana 13 de junio en el mismo lugar de su último adiós un 13 de julio de 1954.
Este martes, las y los trabajadores arreglan detalles finales a la exposición que se organizó en tres meses, al tiempo que más de un centenar de periodistas graban, miran y retratan lo que será la exhibición.
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