En la edición del periódico del El País de hoy mismo, en el suplemento El País Semanal, aparece un reportaje titulado «Cien escritores en español eligen los cien libros que cambiaron su vida».
Entre las personas que nos dan la lista de los libros que cambiaron su vida nos encontramos con nombres relevantes de hombres y de mujeres de la literatura hispánica.
En esta lista de cien personas creadoras de historias, de ensayos, de poesía, etc.… nos encontramos con un claro desfase entre mujeres y hombres puesto que sólo aparecen veinticuatro mujeres frente a setenta y seis hombres, lo cual y de inicio está bastante descompensado. Estoy segura que existen muchas más mujeres que se dedican a esto de las letras que podían haber estado en esta lista como por ejemplo Carmen Amoraga, Ángeles Caso, Nuria Varela, Lucia Etxebarria, entra otras y por seguir únicamente con las españolas
Pero lo más curioso de esta lista de autores y autoras que nos dan los nombres de libros que cambiaron su vida es eso mismo, los nombres que ellas y ellos nos dan.
Después de hacer un examen de la lista de libros nos encontramos con algunas curiosidades. A saber:
De entre las veinticuatro autoras que aparecen, veinte de ellas reconoce a alguna otra autora presente o pasada en la lista de los diez libros que cambiaron sus vidas. O lo que es lo mismo el 83.4 por ciento de las escritoras de esa lista reconoce que las obras de otras mujeres han influenciado su propia vida.
De los setenta y seis autores de la lista, sólo diecisiete de ellos reconoce a alguna autora de entre las obras elegidas. O sea que solamente un triste 22.36 por ciento de ellos admite que ha habido alguna autora que les ha marcado con su obra.
Pero hay más lecturas sobre este reportaje puesto que si vemos las listas de las obras elegidas por mujeres y hombres nos encontraremos que las mujeres escritoras eligen a su vez, más escritoras que los hombres.
Así nos encontramos que entre las veinticuatro mujeres autoras han elegido a un total de cuarenta y cinco obras de otras mujeres mientras que entre los setenta y seis hombres tan sólo han elegido diecinueve obras de mujeres.
Seguramente habrá quien opine que las listas son sólo eso, listas. Pero también denotan cierta visión de la realidad cotidiana y la que yo detecto en esta lista que hoy nos presenta El País es que se sigue obviando el trabajo literario que cientos de mujeres han realizado a lo largo de historia. Que siguen faltando muchos nombres de mujeres escritoras tanto en el apartado de las que elaboran las listas, como en los nombres de las obras que marcaron vidas de otros autores y autoras.
En la redacción de la historia del arte, de nuevo se ha olvidado la aportación que han hecho cientos, miles de mujeres, a la cultura en todos los ámbitos y eso se sigue notando en los libros de texto que se utilizan en las escuelas y en los institutos.
Es importante que al alumnado actual se le enseñen nombres como los de Maria de Zayas y Sotomayor, Flora Tristán, Fátima Mernissi, Isabel Clara Simó, Almudena Grandes, Rosa Montero, Mercedes Salisachs, Teresa Moure, Julia Navarro y tantas otras. Ellas también aportan arte y cultura a nuestra vida y sus obras deben ser leídas y reconocidas.
Ellas también saben lo que es el esfuerzo que supone enfrentarse a escribir un libro y merecen todo nuestro reconocimiento. Quizás si desde las escuelas y los institutos también se las recordara como creadoras de obras maestras la lista publicada hoy tendría más nombres de mujeres literatas.
Yo, desde aquí animo a leer más obras escritas por mujeres. Os aseguro que siempre nos encontraremos con sorpresas muy gratas.
* Periodista y feminista en Oventic, Valencia, España.
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08/TM/GG
