Inicio Luz de vida

Luz de vida

Por Cecilia Lavalle

Ella estaba sentada, como todas las mañanas, frente a su taza de café y sus medicinas: siete pastillas en total, todas en hilerita. Era un día como cualquier otro, con su sol, sus pájaros, su sillón preferido y sus siete pastillas.

Hasta combinan los colores, me dijo. Azul para un malestar, roja para otro malestar; la verde para disminuir los efectos secundarios de la azul, la morada para no sé qué, la amarilla para que la morada no haga mucho daño, la anaranjada para algo que tiene que ver con el oxígeno en la sangre, y la blanca quien sabe para qué.

Recordó que hacía ya cuatro años de esta tediosa y necesaria combinación de pastillas Recordó que un día, sin saber cómo, a sus 28 años, su vida empezó a desmoronarse en un ir y venir de desmayos, ir y venir de fiebres, ir y venir de médicos, especialistas, enfermeras, inyecciones, análisis, tomografías, y desesperanzas. Recordó que apenas si recordaba cómo era su vida antes.

¿Sabes lo que significa quedar de repente y sin previo aviso sumida en la nada? Me preguntó. ¿Sabes lo que es estar sentada en un sillón, y volver a la vida horas después, sin saber qué pasó durante esos instantes? ¿O fueron horas? ¿O días? ¿Sabes lo que es perder de pronto instantes de historia, segundos de recuerdos, centésimas de lucha?

Los médicos dijeron que era y no era un tumor cerebral; y como es y no es, le pusieron por nombre pseudo tumor cerebral. Controlable, afirmaron; de cuidados, dijeron; de pastillas, concluyeron. Nada de esfuerzos, ni leer, ni ver televisión, ni trabajar en la computadora, ni angustiarse, ni preocuparse, ni, ni, ni, ni…

-¿Y a qué horas voy a vivir? Me preguntó. Porque para mí la vida no es sólo cumplir años, llegar a vieja, así sin más, sin nada más. Para qué vivir vegetando muchos años. Mejor pocos pero intensamente, resolvió.

Tomó su café, una a una sus pastillas, y se sentó tranquilamente frente a su computadora, par revisar los datos de su tesis de maestría.

La luz entraba por la ventana. Luz de día, luz del sol, Luz, como su nombre.

Apreciaría sus comentarios: [email protected]

*Articulista y periodista de Quintana Roo

2004/CL/GV/SM

Este Web utiliza cookies propias y de terceros para ofrecerle una mejor experiencia y servicio. Al navegar o utilizar nuestros servicios el usuario acepta el uso que hacemos de las cookies. Sin embargo, el usuario tiene la opción de impedir la generación de cookies y la eliminación de las mismas mediante la selección de la correspondiente opción en su Navegador. En caso de bloquear el uso de cookies en su navegador es posible que algunos servicios o funcionalidades de la página Web no estén disponibles. Acepto Leer más