El estado mexicano de Oaxaca registra altos índices de mortalidad materna, superiores en 36.7 por ciento a la media nacional, debido a deficiencias en la atención médica y falta de acceso a los servicios de salud pública, informó hoy la investigadora Martha Castañeda Pérez.
La especialista dijo a cimacnoticias que en 1990 la tasa de mortalidad materna en Oaxaca era superior al doble de la media nacional y en los años 2000 y 2001 se mantuvo esa tendencia, al superar en 36.7 por ciento a la media nacional.
La integrante de la Dirección del Foro Nacional de Mujeres y Políticas de Población, explicó que las desventajas en atención y acceso a servicios de salud pública se evidencian analizando tres indicadores relacionados con la mortalidad materna: embarazos de alto riesgo, el lugar de ocurrencia del parto y la atención durante el puerperio.
Aunque socialmente existen los conocimientos y los recursos para evitar las muertes vinculadas a la maternidad, el deceso de una mujer implica que no recibió los cuidados y atenciones indispensables para conservar su salud, por lo que la mortalidad materna se debe a la falta de equidad de la sociedad, agregó.
Castañeda Pérez recordó que Oaxaca, al igual que Chiapas, Puebla y Veracruz son las entidades con las más altas tasas de mortalidad materna, derivado de la pobreza y marginación en que viven sus habitantes.
Un análisis regional de la mortalidad materna –añadió- nos muestra que ésta prevalece en los niveles de 1980, cuando la tasa nacional era de 9.5.
Explicó que de acuerdo con datos de los Servicios de Salud de Oaxaca en 2001, la tasa media estatal de mortalidad materna fue de 6.3, por regiones la realidad es diferente.
En la Sierra Norte, en ese mismo año se alcanzó una tasa de 10, seguido de Valles Centrales (incluye la Cañada) con 8.6, el Papaloapan con 6.8, Costa y Sierra Sur con 5.3, Istmo con 3.7 y la Mixteca con 3.6.
Añadió que la falta de acceso a la seguridad social es una de las constantes en las muertes durante el embarazo, parto y puerperio, «en los últimos dos años el 89.9 por ciento de las difuntas carecían de esta prestación, sólo estaban cubiertas por los servicios de salud para población abierta de la SSO y del IMSS-Solidaridad»
La también secretaria del Centro para los Derechos de la Mujer «Nääxwiin» expuso que la mortalidad materna en la entidad en los años 1999 y 2001, según el lugar en que ocurre, es como sigue: 43.7 por ciento fallecieron en los hospitales, (mujeres que llegaron en un estado crítico); el 47.4 por ciento falleció en sus hogares y el 8.8 en el trayecto a un lugar para ser atendidas.
POCA Y MALA ATENCIÓN
En los aspectos socioculturales de la atención del embarazo, explicó que el 75 por ciento de las comunidades atendidas por el Programa de Ampliación de Cobertura (PAC), no tienen una clínica cercana, los equipos de salud itinerantes llegan a la comunidad una vez al mes y las familias procuran evitar los gastos de viaje, condiciones que empeoran el estado de salud y aumentan la posibilidad de sufrir daños mayores, incluso la muerte.
Los aspectos culturales y de calidad de la atención tienen un papel importante, se ha documentado la baja escolaridad, que no asisten o no tienen acceso a la consulta prenatal por varias razones, entre ellas los embarazos no deseados, falta de ingresos o empleo, otros hijos pequeños, violencia intrafamiliar y situaciones religiosas, precisó.
Pero también está latente la resistencia a la atención prenatal debido a la violación a los derechos reproductivos y trato poco respetuoso a las usuarias de los servicios médicos institucionales así como la escasez de medicamentos e insumos.
Un tema controvertido, agregó, es la «medicalización» del parto, pues entre otras cosas se señala que este proceso ha aumentado el número de cesáreas innecesarias, ha restado poder de decisión de las mujeres sobre su cuerpo y las ha colocado frente a relaciones poco respetuosas por parte de los prestadores de servicios, así como a recibir atención de calidad deficiente.
MUY JÓVENES Y MUY POBRES
En un reporte presentado ante el Comité Promotor por una Maternidad sin Riesgos, la jefa del Departamento de Salud Reproductiva de los Servicios de Salud del Estado de Oaxaca, Rosalilia García Kavanagh, dijo en tanto que el número de defunciones entre 1990 a 2001 se redujo de 148 a 74 muertes, respectivamente.
Explicó que hay un incremento en el número de defunciones en las juristidcciones sanitarias de Valles Centrales, Istmo, Tuxtepec y Sierra, mientras que en la Costa y la Mixteca hay un descenso importante.
Por grupos de edad, las muerte materna se concentró en mayor número entre las mujeres de 25 y 29 años en el 2001, mientras en el 2000 el grupo de edad más afectado fue entre 10 y 24 años; así también reportó que 59 de las mujeres fallecidas contaban con una pareja al momento de su deceso.
Expuso que los niveles de mortalidad se asocian con los educativos, de esta forma casi la quinta parte de las mujeres que murieron durante el 2001 no tenía ningún grado de escolaridad.
SJ/MEL
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