El descubrimiento de una de los más grandes museos de sitio de la cultura mixteca tuvo como testiga muda a María Lombardo que al lado de su compañero de vida, Alfonso Caso, trabajó para que ésta obra monumental viera la luz.
María Lombardo novelista del siglo XX retrató en su obra la situación de las mujeres mexicanas de la etapa posrevolucionaria. Denuncia a través de sus personajes la ignorancia, la indefensión social y el fanatismo religioso a los que eran obligadas las mujeres de «buena familia» en México.
En la obra La culebra que tapó el Río, María Lombardo dibuja la situación de las mujeres tzeltales donde la violencia física y la invisibilidad para la comunidad es la norma, su ámbito, el de la domesticidad, se trasforma en su vida que no es más que existir en función de la servidumbre.
María Lombardo critica el feminismo de la década de 1920, éste que ha sugerido que todas mujeres son iguales a las que viven en un ámbito urbano y pertenecen a la clase media, ella señala que la indefensión y la opresión se perciben con mayor fuerza entre las mujeres que menos poseen.
Los ojos de María se posan en la vida de las mujeres indígenas que han sobrevivido a la conquista, que padecieron la colonización las madres forzadas de las y los mexicanos, las que dieron soldaderas y soldados a tres revoluciones nacionales y aún permanecen en la miseria.
Para María, la verdadera justicia estaba en la conquista al derecho a existir, a no morir de hambre y a no padecer violencia como forma exculpatoria en vida.
María Lombardo Toledano nace en Teziutlán, el 6 de diciembre de 1905, hija de una familia de mineros poblanos crece en el seno de una familia de intelectuales y es hasta la edad de 50 años que publica su primera novela.
La obra de literaria de María Lombardo es Muñecos de Niebla, La Luz en la Otra Orilla y la Culebra que Tapó el Río.
María Lombardo muere el 30 de junio de 1964, en la Ciudad de México, heredándonos el reconocimiento a la diferencia y la opresión de las mujeres indígenas a través de sus personajes.
2004/BJ