Inicio Matrícula de alumnas se reduce 40 por ciento

Matrícula de alumnas se reduce 40 por ciento

Por Guadalupe Cruz Jaimes

En México durante 2010 la matrícula de alumnas de 6 a 14 años de edad aumentó a 95 por ciento, pero disminuyó 40.1 por ciento en el grupo de 15 a 24 años debido al embarazo en adolescentes.

Así lo señalaron especialistas del Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y de organizaciones civiles promotoras de políticas públicas en materia educativa.

En el contexto del Día Internacional de la Educación No Sexista, que se conmemora en América Latina (AL) y el mundo desde el 21 de junio de 1989, Marisa Belausteguigoitia, directora del PUEG, indicó que ya se logró que casi el total de las niñas del país cursen la educación básica, ahora «hay que lograr que acaben» su formación escolar.

Para ello, es preciso que los tres órdenes de gobierno garanticen el ejercicio del derecho a la educación de las adolescentes y jóvenes mexicanas mediante políticas públicas que desde un enfoque de género combatan la discriminación contra las alumnas, indicó Malú Valenzuela, de la Red de Educación Popular entre Mujeres (Repem).

A la par se requiere disminuir y eventualmente erradicar el embarazo en adolescentes, que constituye la principal causa por la que niñas y jóvenes abandonan sus estudios, refirió la experta durante la conferencia de prensa convocada por la organización Incidencia Civil en la Educación (ICE).

El Censo de Población y Vivienda 2010 indica que las mujeres cursan en promedio 8.5 años de escolaridad; en ese año el 12.4 por ciento de las niñas y adolescentes de 15 a 19 años de edad ya tenía descendencia y sólo 5.1 por ciento de quienes eran madres en el grupo de 15 a 29 años de edad continuó estudiando.

Valenzuela añadió que 9.3 por ciento de las jefas de hogar tenía entre 12 y 29 años de edad, y 31.1 por ciento nunca había asistido a la escuela ni concluido la educación primaria.

Así, el 11.3 por ciento de las mujeres mayores de 45 años de edad no sabe leer ni escribir, mientras que el analfabetismo es de 33.7 por ciento entre las mexicanas de 75 años y más.

A la disminución en la matrícula escolar se suma la segregación de las mujeres a profesiones del área de las humanidades, toda vez que ellas representan el 69.4 por ciento de quienes cursan estas carreras, y sólo alcanzan el 17.2 por ciento de las ingenierías.

Entre las consecuencias de la falta de acceso a la educación de mujeres, niñas y adolescentes, es la dificultad para conseguir empleo en condiciones de trabajo dignas, situación que las expone a ser víctimas de explotación laboral y sexual.

Muestra de ello es que de los 7.5 millones de jóvenes que en el país no estudian y tampoco trabajan, 6 millones son mujeres, dijo Valenzuela, con base en un reporte que en 2010 elaboró el Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la UNAM.

En este escenario, organizaciones como ICE, Repem y la Red de Educación de las Personas Jóvenes y Adultas de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) y el Grupo Popular de Educación para Mujeres (GEN) junto con el PUEG- que forman parte de la Campaña Global para la Educación- realizaron hoy en México, AL y el mundo, acciones de denuncia y llamaron a los gobiernos de los distintos países a emprender políticas públicas dirigidas a las mujeres que están fuera del sistema escolar para lograr que concluyan su formación académica.

11/GCJ/RMB/LGL

Este Web utiliza cookies propias y de terceros para ofrecerle una mejor experiencia y servicio. Al navegar o utilizar nuestros servicios el usuario acepta el uso que hacemos de las cookies. Sin embargo, el usuario tiene la opción de impedir la generación de cookies y la eliminación de las mismas mediante la selección de la correspondiente opción en su Navegador. En caso de bloquear el uso de cookies en su navegador es posible que algunos servicios o funcionalidades de la página Web no estén disponibles. Acepto Leer más

-
00:00
00:00
Update Required Flash plugin
-
00:00
00:00
Ir al contenido