Una hora y media caminando o esperar el camión de la leche que pasa a las 4 de la mañana o pagar hasta 5 dólares de transporte, son algunas de las calamidades que una mujer embarazada de las zonas rurales del norte de El Salvador tiene que pasar para llegar a la clínica del municipio y recibir atención médica.
Isabel López, trabajadora de salud en el departamento de Chalatenango, afirma que la escasez de personal, las largas distancias y la falta de información dificultan a una mujer mantener su control prenatal por lo que deja de atenderse, y se arriesga a tener un parto no controlado o sufrir muerte materna (MM) o la de los hijos.
El tema de la MM es muy poco tratado a nivel nacional. Según datos del Ministerio de Salud, en 2009 en el país centroamericano ocurrieron 70 muertes maternas, 20 de ellas de adolescentes.
El 90 por ciento de todas las MM ocurrieron en el nivel socioeconómico bajo; en 2010 el numero de fallecimientos disminuyó a 64.
La ministra de Salud salvadoreña, María Isabel Rodríguez, ha declarado que «las necesidades de salud sexual y reproductiva de las mujeres de las zonas rurales es una de los principales preocupaciones del gobierno y en vista de la situación actual y con miras a cumplir los Objetivos del Milenio propuestos por el PNUD, este año se lanzó el Plan Estratégico para reducir la Mortalidad Materna, Perinatal y Neonatal, asegurando que la disminución debe ser más drástica porque casi el 90 por ciento de las mortalidades maternas es absolutamente prevenible».
De acuerdo con datos oficiales, las zonas rurales registran más casos de MM, principalmente en el occidente del país.
Las muertes maternas en 2010 fueron lideradas por la zona occidental (19), siguieron la oriental (16), la central (13), la metropolitana (10) y la paracentral (6). Por área geográfica hubo 43 MM en la zona rural y 21 en la zona urbana.
Según el Ministerio de Salud, la mayoría de estas muertes maternas son prevenibles, ya que de los 64 fallecimientos por esta causa ocurridos durante 2010, 39 se pudieron evitar, 22 eran potencialmente evitables y solamente tres eran no prevenibles.
El nuevo programa de las autoridades sanitarias busca reducir de 71.2 por ciento a 52.8 por ciento la tasa de MM por cada 100 mil nacidos vivos para el 2014. El proyecto fue lanzado en febrero pasado y se espera ver resultados con las cifras finales de 2011.
La información oficial atribuye a causas directas la mayoría de MM, entre ellas: hemorragias posparto y enfermedades hipertensivas del embarazo. Asimismo reconoce que las muertes perineonatales son por prematurez, malformaciones congénitas e infecciones, y a la vez reconoce que la mayoría de muertes maternas son prevenibles.
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