Actualmente al menos 2 millones 450 mil víctimas de la trata están trabajando en condiciones de explotación en el mundo y cada año se le agregan un millón 200 mil más, la mayoría mujeres, niñas y niños, que se ubican tanto en las fronteras como dentro de los límites nacionales, señaló la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
De acuerdo con el informe Estado de la Población Mundial 2006, Hacia la Esperanza, Las Mujeres y la Migración Internacional, presentado por el Fondo de Población de las Naciones (UNFPA), la trata de seres humanos es, de las actividades comerciales ilícitas, la que ocupa el tercer lugar entre las más lucrativas del mundo, después del tráfico de armas y el de estupefacientes.
Señala también que esta «industria» genera cada año entre 7 mil y 12 mil millones de dólares estadounidenses sólo por la venta inicial de personas, pues estimaciones de la OIT indican que una vez que las víctimas han llegado al país de destino, los tratantes obtienen sumas adicionales por 32 mil millones de dólares cada año, «la mitad generadas en los países industrializados y casi una tercera parte en Asia».
En el capítulo 3 del informe del UNFPA, Venta de Esperanzas y Robo de Sueños, también se refiere el testimonio de Sylvia, de 19 años de edad, originaria de Ungheni, Moldova, quien con engaños de un supuesto trabajo fue sacada de su país y se vio sumergida en una pesadilla, violación, privación y enfermedad.
«Al principio, pensé que todas las historias acerca de mujeres que eran objeto de trata eran falsas, una táctica para meter miedo. Pero ahora sé que es verdad y quiero ayudar a las demás a comprender que eso es real y que puede pasarle a cualquiera», dice Sylvia cuando se le pregunta porqué quiso relatar su experiencia.
De acuerdo con el informe UNFPA, la trata de seres humanos constituye el siniestro reverso oculto de la globalización, pues también ha generado a nivel mundial la delincuencia organizada.
Las víctimas en su mayoría son migrantes en busca de una vida mejor que suelen ser atraídas con el señuelo y la promesa engañosa de un trabajo digno.
También se cita otro tipo de hechos que suceden al exponer que una novia pedida por correo, tal vez entre legalmente a un país, pero después puede ser sometida a trabajo forzado, una trabajadora del servicio doméstico puede terminar siendo objeto de trata con fines de explotación sexual.
El informe del Estado Mundial de la Población 2006 sostiene que la trata de seres humanos es un fenómeno general impulsado por la demanda y estimulado por la pobreza y el desempleo, «lo frecuente es que muchas víctimas de trata respondan a los anuncios que les ofrecen empleo», por ejemplo cita que en Serbia y Montenegro, 64 por ciento de los reclutadores son personas conocidas por la víctima.
Las mayores cantidades de personas que han sido objeto de trata internacional están en Asia sudoriental y meridional, en cantidades que se estiman en 225 mil y 150 mil, respectivamente.
Estados Unidos reporta que cada año 100 mil personas oriundas de países de la ex Unión Soviética y 75 mil de países de Europa oriental son objeto de trata, a las que se agregan otras 50 mil africanas y 100 mil más de América Latina y el Caribe.
De esta última región, la trata afecta principalmente a las mujeres procedentes de Brasil, Colombia, República Dominicana, Guatemala y México, que son llevadas con fines de explotación sexual a América del Norte y Europa occidental. En lugares distantes como Japón y España hay unas 70 mil brasileñas que trabajan como prostitutas.
Es menor el número de mujeres que denuncian su situación, por temor a ser deportadas ?sostiene el informe- otras titubean en comunicarse con la policía, pues los agentes han sido acusados a veces de solicitar ellos mismos sus servicios.
El Protocolo de las Naciones Unidas sobre la trata recomienda que los gobiernos permitan a las víctimas permanecer, transitoria o permanentemente, en el país de destino, también exhorta a velar por la seguridad de las víctimas y proteger su identidad y privacidad, además de ver la posibilidad de otorgar asesoramiento e información, vivienda, servicios médicos y asistencia en materia de educación, empleo y capacitación
Así como también recomienda posibilitar que las víctimas reciban compensación por los daños sufridos. Por ejemplo, una mujer recibió más de 400 mil dólares, en indemnización compensatoria de daños y más de 300 mil dólares, con carácter punitivo, en un juicio entablado contra un intermediario internacional de matrimonios.
El relator especial sobre la violencia contra la mujer, para combatir eficazmente la trata es preciso abordar las causas profundas, entre ellas la pobreza y la falta de igualdad de oportunidades, ya que las mujeres carentes de seguridad económica son presa fácil y están dispuestas a marcharse de su país en busca de un trabajo en el extranjero.
Por tanto, sostiene el UNFPA, la eliminación de la discriminación contra la mujer es no sólo una prioridad de derechos humanos, sino también una medida clave para eliminar la trata.
06/SJ/LR
