En entrevista con Cimacnoticias, al finalizar su participación en el ciclo «Conversaciones con mujeres» de la organización Semillas donde el lunes pasado ella fue la invitada, Lydia Cacho señaló que aún no conoce los avances de las investigaciones que actualmente está llevando a cabo la nueva comisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y que encabeza Juan N. Silva Meza, ya que ni esta institución ni la propia comisión le han dado ningún tipo de información de esa naturaleza.
Sin embargo, dijo, las y los magistrados y abogados de la Suprema Corte, quienes han estado realizando audiencias constitucionales en Quintana Roo, han interrogado al Procurador de Justicia de este estado, quien en un principio mintió y dio mal los datos del caso Succar Kuri, negando que existiera una red de pornografía.
Y aunque, a decir de Cacho Ribeiro, la SCJN está haciendo un trabajo muy acucioso, aún no le han dado una fecha exacta sobre la entrega de resultados, sólo se tiene como tentativo el mes de septiembre y no de mayo como se había manejado originalmente.
Cacho Ribeiro dijo a esta agencia que un grupo de ministras y ministros de la SCJN han entendido que es antijurídica una concertación como la que llevó a cabo Mario Marín y su equipo de colaboradores en su caso, consistente en un triángulo del ejercicio de abuso del poder.
Es decir, están Mario Marín y su equipo, Succar Kuri y Kamel Nacif y sus amigos y las víctimas y quienes les dimos protección. Con esto, subrayó, lo que la SCJN está haciendo por primera vez en la historia es ir al fondo de este triángulo para poder entender cómo una concertación antijurídica puede convertirse en una violación de los derechos humanos constitucionales no solamente de una mujer sino del resto de las víctimas
Por lo que la SCJN está abordando el caso de Succar Kuri para así encontrar en dónde se perdió o se desvió la investigación y cómo se estructura la corrupción que conllevó a su detención (de Lydia en diciembre de 2005), esa es la intención de la Suprema Corte, indicó.
Lo anterior, Lydia lo encuentra «maravilloso».
Asimismo aseguró que quien espere que la SCJN haga una investigación punitiva es porque no entiende la función de esta instancia.
«La SCJN esta respondiendo única y exclusivamente a la petición del Congreso que hizo una solicitud de investigación para llevar a cabo un juicio político a Mario Marín».
Explicó que jurídicamente la SCJN está haciendo lo que le toca ya que no puede llevar a juicio a Mario Marín por un caso que tiene que llevarse en los juzgados penales.
«Lo que la SCJN tiene que hacer es investigar, cuando ya se rebasaron todas las instancias de poder por los altísimos niveles de corrupción, que están evitando que se pueda llegar a una resolución justa de los hechos».
NO RETIRAN DENUNCIAS
Cacho Ribeiro desmintió que niñas víctimas de esta red de pornografía estén retirando sus denuncias, tal como se había manejado en algunos medios.
Explicó que de acuerdo las leyes, y la forma en que están penalizados estos delitos de pornografía, violación y corrupción de menores de edad, si las niñas se retractan deben primero demostrar tal retractación.
Lo anterior, ya que a decir de la periodista, en la mayoría de los casos los abusadores de menores y los pederastas «tienen un poder extraordinario» con lo que logran convencer, comprar o coptar a sus víctimas y sus familiares para convencerlas de retractarse, por lo que la mayoría de los países avanzados está tipificado de tal forma que no se le permita o se le facilite al pederasta o abusador coptar fácilmente a las víctimas.
En este caso, señaló, ninguna niña ha demostrado su retractación.
Uno de los casos, contó, es el de una joven a la que llaman Pocahontas y la cual ha sido carta clave de la defensa de Succar Kuri. Ella, dijo Cacho Ribeiro, nunca negó los hechos y reconoció su firma al final de su declaración. Junto con esta última va incluido el video donde Succar Kuri explica cómo abusó de ella, el cual es la prueba para el juez.
«Evidentemente los abogados de Succar Kuri son los abogados de un pederasta, lo único que podemos esperar es que ellos sigan insistiendo que es inocente, pero lo que no podemos olvidar es el video donde dice todos los nombres de las víctimas».
Este video, subrayó, fue elaborado por la Procuraduría de Justicia de Quintana Roo dentro del ámbito legal, para poder obtener más pruebas lícitas, por lo que es un video lícito, y el cual el abogado de Succar Kuri ha intentado borrar en los medios
No se les puede obligar a retractarse de su denuncia. «Allí está el video y coinciden perfectamente los nombres que dio Succar Kuri con los nombres de las víctimas que denunciaron ante las autoridades» concluyó.
LAS NIÑAS DE NADIE
Pero a pesar de que los demonios del edén la persiguen aún, sigue en pie de lucha, aguerrida en su labor y dominando el miedo que, dice, a veces tiene. Ella indaga, pregunta, escucha y ayuda. Con todo eso hoy escribe «Las niñas de Nadie: el eco de las adolescentes como herramienta para detener el tráfico de mujeres en México», texto que será publicado el año próximo bajo el sello de Grijalbo.
En el texto recoge los testimonios de adolescentes que han sobrevivido a las redes de trata de personas, un tema que ha sido manejado por los medios de comunicación «de manera amarillista», dijo Lydia.
Estos testimonios «son un regalo extraordinario que nos dan las mujeres que han sobrevivido a actos inenarrables de violencia y que se atreven a salir adelante», sobre la forma «en que se puede transformar este país y evitar que otras jóvenes caigan en estas experiencias», señaló.
Una de las voces es la de Areli, una joven venezolana de 19 años quien luego de vivir la muerte de su madre fue sacada de su país a base de engaños. Relató Areli a Lydia: «Un día conocí a Mariel, un mujer muy bella que me dijo: si tú quieres puedes ser modelo y ganar mucho dinero, estudiar y sacar a tu abuela de las calles. En México hay mucho trabajo para jovencitas venezolanas como tú».
«Entré en la Web apunté mis datos tal como me dijeron, mandé mi fotografía y una semana más tarde Mariel se comunicó conmigo. Ya tenía mi boleto de avión para México y me llevó con mis documentos para sacar un pasaporte y todo en regla. Allá les pagas, me dijo, con tu trabajo. Nunca imaginé que llegando a Monterrey me iban a quitar mis papeles y decirme que les debía 5 mil dólares por el billete de avión».
Fue así como Areli comenzó a sufrir la trata de mujeres. Luego de escapar de su proxeneta fue rescatada de una cárcel de Cancún.
Y aunque «Las niñas de Nadie: el eco de las adolescentes como herramienta para detener el tráfico de mujeres en México» verá la luz hasta el próximo año, dice que lo «publicará con un amparo en mano».
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