La Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA en inglés) otorgó ayer su Premio de Derechos Humanos 2009 al Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan de México, un galardón que reciben cada año organizaciones o personas que contribuyen significativamente a la promoción de los derechos humanos en América Latina.
El equipo de ‘Tlachinollan’ trabaja en condiciones muy difíciles y a costa de muchos riesgos personales para defender los derechos de las comunidades indígenas más vulnerables y marginalizadas en México, afirmó la directora ejecutiva de WOLA, Joy Olson.
Con sede en Tlapa de Comonfort, «Tlachinollan» ha trabajado durante más de 15 años en una de las regiones más pobres de México, las regiones de la montaña y la costa chica de Guerrero, donde la pobreza, la discriminación y el abandono de las comunidades indígenas son comunes; en tiempos recientes, el estado se convirtió en lugar de producción y transportación de drogas.
Ante esta situación, la respuesta del gobierno fue un mayor desplazamiento de más soldados a un estado de por sí militarizado. Durante sus primeros diez años (1994-2004), «Tlachinollan» documentó 68 casos de violaciones a derechos humanos por parte del ejército mexicano, incluyendo tortura, desaparición forzada y violaciones a mujeres indígenas, y sólo en lo que va de 2009 documentó 14 casos de abusos militares, incluyendo tortura y asesinato ilegal.
Para el congresista estadounidense Jim McGovern, galardonado con este premio en 2007 y copresidente de la Comisión de Derechos Humanos Tom Lantos, la gravedad de la situación de los derechos humanos en Guerrero destaca la importancia de la labor realizada por el Centro de Derechos Humanos ‘Tlachinollan’, que se ha ganado el respeto de la comunidad internacional. El premio, así, ofrece la oportunidad para recordarle a la gente que ‘Tlachinollan’ que no está sola, que tienen nuestro apoyo.
En febrero de 2009, ‘Tlachinollan’ se vio forzado a cerrar sus oficinas de Ayutla de los Libres, Guerrero, debido a las amenazas, intimidación y persecución de activistas defensores de los derechos de los indígenas que colaboran con el Centro, y al asesinato de dos líderes indígenas.
En mayo de 2009, la Corte Interamericana de Derechos Humanos otorgó medidas provisionales a más de cien defensores de los derechos humanos en Guerrero, incluyendo a todo el personal de «Tlachinollan».
Nos honra que ‘Tlachinollan’ reciba nuestro Premio de Derechos Humanos 2009. Ellos están a la vanguardia como defensores y promotores de derechos humanos. WOLA reafirma su compromiso de trabajar con socios como ‘Tlachinollan’ en la defensa de los derechos humanos, reiteró Olson.
El Premio se entregó ayer en Washington. En la ceremonia de entrega, Abel Barrera, director general de «Tlachinollan» afirmó: nos sentimos honrados de recibir este premio. Queremos agradecer a WOLA por su reconocimiento a organizaciones como la nuestra, que trabajan en zonas marginalizadas y por saber mirar a la montaña de Guerrero como uno de los focos rojos donde se cruzan problemáticas muy graves que condensan la crisis de los derechos humanos que vivimos en México, agregó.
Con el premio de WOLA suman ya dos reconocimientos que recibe «Tlachinollan» en septiembre; el primero, entregado el pasado viernes 19, fue la medalla Emilio Krieger 2009, otorgado por la Asociación Nacional de Abogados Democráticos, por su constancia y tenacidad en la defensa de los derechos humanos de los pueblos indígenas.
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