Inicio Presentan caso de trata en el Senado de EU

Presentan caso de trata en el Senado de EU

Atrapadas y seducidas por

«enganchadores-reclutadores» que les ofrecen «trabajo» en los Estados Unidos, decenas de miles de mujeres en Northern Mariana Islands (Islas Marianas) que emigran de países asiáticos –China, Filipinas, Bangladesh y Tailandia– son explotadas en la industria del vestido, obligadas a ejercer la prostitución e ,incluso, a practicarse un aborto en contra de su voluntad.

Una de estas víctimas expuso su caso recientemente, 8 de febrero, en el Senado.

«Me ofrecieron trabajo, llegaron hasta la zona rural donde vivía, en Las Filipinas. Me dijeron que trabajaría de mesera en un restaurante en Saipan, en las Islas Marianas. Acepté la oportunidad», dijo ante las y los senadores:

Como hija mayor de una familia de cinco hermanos, cuando le informaron que ganaría 400 dólares al mes, creyó que era dinero suficiente para mantenerse y «mandar dinero a mi familia y posteriormente regresar para estudiar el bachillerato».

La historia fue otra. A ella, junto con una joven mujer también de Filipinas, las obligaron a trabajar en un burdel.

«Una mujer llamada Mamasong, nos quitó nuestros documentos y nos dijo que teníamos que trabajar primero para pagar los boletos de avión o de lo contrario nuestras familias sufrirían las consecuencias. El primer día en Saipan, fui violada por cuatro hombres. Tratamos de huir dos veces, pero siempre estaban al frente…», relata.

Luego vinieron las amenazas. «Mamasong nos dijo que si intentábamos dejarla llamaría a la policía. Estábamos muy asustadas. Le rogamos que nos diera el trabajo que nos había prometido en Las Filipinas». Pasaron varios días y al fin lograron escapar y refugiarse en una casa católica, donde se refugiaron.

En la reunión con senadores, la víctima de trata –quien obtuvo la visa «T» que le permite vivir en los Estados Unidos y aplicar en tres años para la residencia permanente– concluyó: «Espero que este sistema ilegal sea frenado, no quiero que esto le pase a nadie más».

Ahora ella quiere «encontrar un trabajo, ahorrar dinero para mi familia y regresar a la escuela, quiero ser maestra de inglés. Ya no tengo miedo».

El Senado esta considerando atraer a las Islas Marianas, territorio estadounidense, bajo las leyes laborales y de migración de la Unión Americana, sobre todo en la homologación de los salarios, pues los que reciben las mujeres, que «corren con suerte» e ingresan a laborar en la industria del vestido, son de 3.05 dólares la hora y forzándolas a trabajar hasta 20 horas. Algunas no reciben salario por el tiempo extra, trabajando en condiciones sumamente deplorables.

EL PARAISO PERDIDO

Cabe destacar que esta víctima de trata llegó al Senado y pudo ser escuchada, en gran medida por el esfuerzo realizado por la revista Ms Magazine, la cual denunció en 2006 en un amplio reportaje (El Paraíso Perdido) todas y cada una de las atrocidades que las mujeres viven a diario en territorio estadounidense.

Los esfuerzos de denuncia para que el gobierno tomara cartas en el asunto, sobre todo en el Congreso y en la Casa Blanca, fueron bloqueados por Jack Abramoff, quien tenía acceso a congresistas y senadores y tiene múltiples cargos criminales, entre ellos fraude y evasión.

Ms Magazine publicó fotografías donde se ve un galerón de una fábrica de ropa con por lo menos 300 mujeres, que cortan, planchan, doblan las blusas, con tal eficiencia y atención en sus tareas que parecen ser también máquinas humanas.

Las fábricas son subsidiarias de varias de las mejores casas de prendas para mujeres: J. Jill, Elie Tahari, Ann Taylor, Liz Clairbone. The Gap, Ralph Lauren.

Cada máquina tiene su contador oficial. Si no se termina la meta oficial, la trabajadora tendrá que quedarse más tiempo sin que esto le signifique más salario. Ellas tienen que pagar a sus «reclutadores» siete mil dólares, lo que cuesta un año de contrato de trabajo, muchas veces consiguen el dinero por medio de préstamos que deben pagar hasta con 20 por ciento de intereses.

Otra de las situaciones por la que pasan las mujeres traídas a «trabajar» es lo relacionado con el turismo sexual, pues muchas de ellas son obligadas a prostituirse. No hay estadísticas reales pero se estima que el 90 por ciento de las prostitutas en la isla son trabajadoras de la industria del vestido, principalmente las de origen chino, quienes venden los favores sexuales a 50 dólares la noche, también las obligan a convertirse en strippers.

Así, actualmente el sistema de trabajadores huéspedes en estados Unidos, está como si fuera un sistema de «esclavas», denuncia de Jolene Smith, director ejecutivo de Free the Slaves, y experto en trata de personas.

07/LPB/GT/CV

Este Web utiliza cookies propias y de terceros para ofrecerle una mejor experiencia y servicio. Al navegar o utilizar nuestros servicios el usuario acepta el uso que hacemos de las cookies. Sin embargo, el usuario tiene la opción de impedir la generación de cookies y la eliminación de las mismas mediante la selección de la correspondiente opción en su Navegador. En caso de bloquear el uso de cookies en su navegador es posible que algunos servicios o funcionalidades de la página Web no estén disponibles. Acepto Leer más

-
00:00
00:00
Update Required Flash plugin
-
00:00
00:00
Ir al contenido