Realizan foro “Mujer, paz y desarrollo” en Vietnam

Daño a la salud física, psicológica y social, menoscabo a sus Derechos Humanos y un riesgo para su vida constituyen consecuencias de la desigualdad, discriminación, violencia de género y pobreza, que sufren millones de mujeres en el mundo.
 
Cada vez son más las voces en las agendas globales de desarrollo que se pronuncian contra esos males, a fin de que se reconozcan los derechos, valores y contribuciones socioeconómicas y políticas de las mujeres.
 
También, numerosos planes e iniciativas están enfocados a elevar la conciencia pública sobre la necesidad de que éstas desarrollen una vida digna, integral y justa.
 
Pese a los éxitos alcanzados en ese sentido en determinados países, las 12 áreas de especial relevancia en la lucha por la equidad de género identificadas en la Plataforma de Acción de Beijing (1995) siguen siendo retos en muchos Estados, según se reconoció recientemente en esta capital durante el foro “Mujer, paz y desarrollo”.
 
Esa cita se celebró en correspondencia con el compromiso del presidente vietnamita, Truong Tan Sang, de destinar los recursos necesarios para reducir la brecha de género en todos los ámbitos, en su intervención ante la ONU en septiembre pasado durante la reunión de líderes mundiales sobre igualdad de género y empoderamiento de las mujeres.
 
Auspiciado por la Unión de las Mujeres de Vietnam (UMVN), en ocasión además de los aniversarios 85 de esa organización, 70 de la ONU y la Federación Democrática Internacional de Mujeres, 20 de la Plataforma de Acción de Beijing, y 15 de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), el foro contó con la asistencia de más de 100 delegados de decenas de países.
 
A los participantes de la India, Laos, Cambodia, Cuba, Estados Unidos, Filipinas, China, Malasia, Indonesia, Tailandia, Myanmar, Venezuela y el país anfitrión se unieron agencias de la ONU y otras organizaciones internacionales, así como diplomáticos de varias naciones y altos dirigentes vietnamitas.
 
El evento efectuado los días 6 y 7 de octubre en el Centro para la Mujer y el Desarrollo aportó al intercambio de información, iniciativas y mejores prácticas de los movimientos de mujeres, así como a la promoción de la comprensión, solidaridad, amistad y cooperación entre la población femenina en el mundo.
 
Sus objetivos fueron comunes a los establecidos en la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer realizada en Beijing (1995): “Avanzar hacia las metas de igualdad, desarrollo y paz”. Asimismo permitió a los asistentes conocer a Vietnam, su gente y en especial las facetas de la vida de las mujeres.
 
El programa incluyó una sesión plenaria y dos talleres. La primera revisó la implementación de la Plataforma de Acción, las experiencias de los países durante ese proceso, y los aspectos del género de la Agenda de Desarrollo Post 2015.
 
Mientras, el taller “Mujeres, paz y seguridad” resaltó los desafíos que en ese último tema enfrentan las mujeres y su papel en la construcción y mantenimiento de la paz y de una cultura que reconozca cuánto contribuyen al desarrollo, y que también respete sus derechos.
 
En tanto, el de “Mujeres y desarrollo” analizó las políticas e iniciativas para garantizar una participación igualitaria y eficiente de éstas en todos los aspectos de la vida, desde las actividades socioeconómicas hasta las políticas.
 
Los delegados adoptaron una declaración con los compromisos de cooperación y esfuerzos concertados entre las mujeres a nivel nacional, regional e internacional en el camino hacia la igualdad, la paz y el desarrollo.
 
Durante la sesión plenaria fue posible conocer la realidad de las mujeres y niñas de varios de los países representados, los logros alcanzados y los principales desafíos.
 
Por ejemplo, por Vietnam hablaron, entre otros, el presidente del Frente de la Patria de Vietnam (FPV), Nguyen Thien Nhan, y su homóloga de la Unión de Mujeres del país anfitrion, Nguyen Thi Thanh Hoa.
 
El líder del FPV resaltó que el país indochino es un miembro activo en la implementación de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer de la ONU, la Plataforma de Acción de Beijing, y el compromiso de cumplimiento de los ODM relacionados con la población femenina.
 
Por su parte, la secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), Teresa Amarelle, afirmó que en su país las personas son el centro y el fin de proyecto social, en el cual las mujeres constituyen parte esencial.
 
Amarelle agregó que en Cuba se aplican políticas, leyes y programas que propician el empoderamiento de las mujeres y contribuyen a favorecer relaciones de género más equitativas.
 
Recordó que la isla caribeña lleva adelante su programa de desarrollo humano enfrentando durante más de 50 años el bloqueo de Estados Unidos.
 
Mencionó como profundas transformaciones en la condición y posición de las cubanas en los últimos 55 años el hecho de que constituyan el 48 por ciento de la fuerza laboral en el sector estatal civil, y reciban igual salario por trabajo del mismo valor.
 
Además, que representen el 60.2 por ciento de los médicos, el 81.9 del personal docente, así como más del 70 por ciento de fiscales y jueces.
 
Así, los mensajes, datos y experiencias compartidas en este encuentro devienen un nuevo impulso para seguir trabajando con vistas a alcanzar en 2030 las metas que demuestren avances concretos en la igualdad de género.
 
*Corresponsal y jefa de Prensa Latina en Vietnam.
 
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