Luis Felipe Bravo Mena, quien fue relecto para un nuevo periodo de tres años al frente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Acción Nacional (PAN), se comprometió a brindar más oportunidades de participación política a las militantes del blanquiazul.
«Por supuesto que queremos avanzar mucho más, con mayor determinación y eficacia para que haya muchas más oportunidades para las mujeres», respondió el dirigente a pregunta de cimacnoticias al anunciar su triunfo en la elección interna panista.
Explicó que el plan estratégico para lograr ese propósito consistirá en desarrollar al interior de «los grupos homogéneos» partidistas, la presencia de más mujeres en el trabajo social y político.
En un proceso electoral sin contratiempos y en el que se puso de manifiesto la disciplina y el orden panistas, Luis Felipe Bravo Mena obtuvo los votos de 152 consejeros nacionales, que representaron el 55.07 por ciento del total, frente a 124 votos para el senador Carlos Medina Plascencia, es decir 44.93 por ciento de los sufragios.
Luego de la toma de protesta del presidente panista, consejeras nacionales consultadas por cimacnoticas coincidieron en que la relección de Bravo Mena «garantiza la continuidad de los trabajos del partido a favor de las mujeres», aunque advirtieron que ocurriría lo mismo de haber triunfado Medina Plascencia.
La presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Patricia Espinosa, confió en que Bravo Mena sabrá enmendar los errores cometidos en su pasada gestión. Al preguntarle cuáles fueron los errores en relación con la participación política de las panistas, Espinosa corrigió: «Bueno, tanto como errores no, pero creo que sí es necesario reforzar las medidas partidistas para una mayor presencia femenina en puestos directivos».
Agregó que desea una dirigencia panista que «sea exigente» con los trabajos del Inmujeres, y dijo que seguramente se estrechará la relación entre el partido y el instituto.
Margarita Zavala afirmó que el PAN «ganó y se fortaleció con una elección ejemplar» y dijo estar orgullosa por las actitudes de ambos contendientes al final del proceso. «Medina Plascencia y Bravo Mena están comprometidos para mejorar los procesos que incluyan a las militantes en la toma de decisiones, así que cualquiera de los dos que hubiera ganado garantizaría ese objetivo».
Dijo que los dos políticos también pugnan por la implementación de políticas gubernamentales con perspectiva de género. «En esta nueva etapa comienza la vigencia de las recientes modificaciones a los estatutos que le dan mayor presencia política a las mujeres», añadió.
Por su parte, la presidenta del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), Teresa Aranda, aseguró que el gobierno federal «seguirá impulsando como lo ha hecho hasta ahora» la participación y reconocimiento de las mujeres en todos los ámbitos, y que la continuidad de Bravo Mena en la presidencia del PAN «va en ese mismo sentido».
Los 277 integrantes del Consejo Nacional estuvieron presentes en la sede del CEN del PAN, para ejercer su derecho al voto «libre y secreto». Solamente un sufragio fue anulado.
Bravo Mena no alcanzó el mínimo de las dos terceras partes del total de votos (184 sufragios), que según el reglamento del proceso es indispensable para declarar un triunfador, por lo que el secretario general del blanquiazul, Jorge Ocejo Moreno, preguntó a los consejeros si procedía una segunda vuelta electoral.
Entonces, Medina Plascencia declinó a participar en una segunda ronda, y ante la ovación de las y los consejeros reconoció la victoria de Bravo Mena.
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