Con la no desaparición de poderes acordada hoy por el Senado de la República, los legisladores de la Cámara Alta están sembrando más espinas en el camino de Oaxaca, advirtió la representante en el estado de Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, Ana María Hernández Cárdenas.
Tras conocer la determinación del Senado que concluye luego de un largo debate que no deben desaparecer los poderes en la entidad –con 74 votos a favor del dictamen que previamente había presentado la comisión de Gobernación y 31 en contra-, la activista calificó de irresponsable la determinación de legisladores.
Es evidente que privilegiaron componendas partidarias, acusó Hernández Cárdenas quien añadió que el PRI el partido perdedor le impone a Acción Nacional lo que tiene que hacer y no le es suficiente que cada tres o cuatro días una persona sea asesinada en Oaxaca, como resultado del problema social y político.
Hernández Cárdenas apuntó que en la entidad el Estado de Derecho está quebrantado y el Senado de la República se convierte en cómplice de la situación que existe en la entidad, donde lo que menos les interesa es el bienestar de la población oaxaqueña.
La responsable de Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad en Oaxaca aseguró que en la pasada visita de la subcomisión de senadores había suficientes evidencias de que en Oaxaca no hay gobernabilidad, de ahí que de manera improvisada en el hangar trataran de mostrar el trabajo del Ejecutivo; en tanto el Legislativo sesione a salto de mata y muchas de las oficinas del Judicial permanecen cerradas desde hace mucho tiempo.
No entiendo, reiteró la entrevistada, qué más necesitan para detener la barbarie, permitir que se prolongue el conflicto y consideren que no es fundamental desaparecer los poderes, cuando ya no es posible contener el movimiento ni encuentran una salida.
Son demasiados oídos sordos y necios y mucha la impunidad concedida a un sólo partido político, puntualizó Hernández Cárdenas.
Aline Castellanos, abogada de esa misma organización, lamentó por separado la determinación del Senado de la República. Las y los oaxaqueños esperábamos que tuvieran un poco de sensibilidad, luego de lo que habían escuchado y visto.
Lo cierto, añadió, es que ahora más que nunca seguramente se habrán de activar las acciones pacíficas para demandar la salida de Ulises Ruiz como gobernador de Oaxaca.
Su renuncia –de Ruiz Ortiz- sería lo mínimo para saldar esa deuda histórica de falta de atención a la población, es lo más emergente para que el pueblo de Oaxaca pueda aspirar a la gobernabilidad, Ulises no puede continuar en el cargo, ya lo dejó de facto, falta la parte legal.
06/SJ/CV