Es «urgente» que la Cámara de Diputados elija a las personas que ocuparán los tres lugares faltantes del Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE), ya que mientras la conformación del Consejo esté incompleta, sus decisiones pueden ser impugnadas.
En entrevista con Cimacnoticias, Clara Jusidman, integrante del Comité Conciudadano para la Observación y Reforma Electoral, conformado por diversas organizaciones mexicanas, señaló que el artículo 41 constitucional no prevé la integración actual del Consejo General del IFE, por lo que su labor puede ser invalidada.
El retraso en la elección de las y los nuevos consejeros del Instituto representa «una grave omisión en el cumplimiento de las responsabilidades del Congreso», la cual ha provocado que el Consejo opere desde hace cerca de 40 días, con sólo seis integrantes.
La situación es «alarmante» porque el IFE tiene que intervenir en procesos electorales locales y federales el siguiente año, «si en este escenario resuelve las quejas interpuestas por los partidos, a quienes se les acuse de actuar ilegalmente puede decir que lo resuelto por el Instituto no vale», ejemplificó, la también integrantes de Incide Social.
«Es urgente que la Cámara de Diputados elija a quienes serán los tres consejeros faltantes, mediante un proceso transparente, que tenga en cuenta la autonomía y conocimientos de las personas candidatas, más que la cuota partidista», señaló.
En este sentido, el Comité Conciudadano para la Observación y Reforma Electoral, cuya finalidad es aportar al avance en los procesos y en la institucionalidad que garanticen el ejercicio de los derechos políticos de la ciudadanía, realizó un pronunciamiento al respecto.
En su escrito, dado a conocer hoy en conferencia de prensa, expresaron que es «claro que en las discusiones que se dan en la Cámara de Diputados no domina el interés por tener consejeros con probidad, trayectoria en materia electoral, autonomía y legitimidad sino garantizar una representación por cuotas partidarias».
El incumplimiento del Congreso en el plazo de selección, «coloca al IFE en la misma circunstancia del 2006, frente a la posibilidad de que un partido impugne la elección del 2012 por haber estado organizada por un Consejo elegido en forma irregular desde una perspectiva constitucional y sobre la base de intereses partidarios».
Por lo anterior, la organización ciudadana exige que «se garantice la fortaleza, legitimidad y autonomía de la autoridad electoral, como condición indispensable para honrar el derecho de la ciudadanía a votar y ser votado en elecciones democráticas».
De igual modo, señalaron que es preciso el nombramiento de las personas que ocuparán los tres lugares faltantes en el Consejo General del IFE, para ello, la Cámara baja deberá «hacer los ajustes necesarios para enmendar los vicios constitucionales derivados de su omisión».
Indicaron también que la elección debe ser por consenso entre todas las fracciones parlamentarias de San Lázaro.
Por último, el Comité Conciudadano para la Observación y Reforma Electoral concluyó que el retraso del Legislativo es producto de una «reforma política, hasta ahora inacabada», que debe revisar el procedimiento de elección de los consejeros integrantes del Consejo General del IFE para evitar su sometimiento a los partidos políticos y a otros intereses de grupo.
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