Las iniciativas de reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) presentadas en la Cámara de Diputados desestiman los derechos de las trabajadoras y solamente dos, abordan algunos de los problemas que enfrentan las mujeres en el ámbito laboral.
Se han presentado 52 iniciativas de reforma a la LFT, cuatro de ellas integrales: la del Partido Acción Nacional, la del Partido Alianza Social, la de la UNT-PRD y la conocida como Ley Abascal.
Las dos últimas reformas superficialmente retoman los derechos de poco más de 15 millones de trabajadoras que hay en el país, según la Encuesta Nacional de Empleo Urbano del Inegi.
Rosario Ortiz de la Red de Mujeres Sindicalistas informó que en la iniciativa de la UNT-PRD retoma algunas de las propuestas de la red, pero no llega al fondo de la problemática. De la de Abascal… «ni hablar».
Alfonso Bouzas, investigador titular del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, advirtió que únicamente están en la mesa de discusión la llamada Ley Abascal y la propuesta de la UNT-PRD , reprobó las dos iniciativas, «por estar alejadas de la sociedad».
Rosario Tapia, integrante de la Comisión del Trabajo en la Cámara de Diputados, dijo que el proyecto Abascal, vulnera el carácter protector de la ley y no retoma la defensa de los derechos de las mujeres, aparentemente plasmados en la legislación.
El coordinador de asesores del grupo parlamentario del PRD, Carlos López Angel aceptó que la propuesta de su partido y la UNT resulta insuficiente para satisfacer las demandas de las mujeres en el mundo del trabajo. Al tiempo opinó que la propuesta Abascal ni siquiera considera a las mujeres.
Rosario Ortiz, indicó que la Red de Mujeres Sindicalistas sostuvo reuniones de trabajo con el PRD por lo que lograron incluir algunos puntos en su iniciativa para ampliar lo derechos laborales de las trabajadoras.
La propuesta UNT-PRD amplía las responsabilidades familiares compartidas, impone sanciones por hostigamiento sexual; considera el estrés como enfermedad profesional.
Así mismo, se busca erradicar la violencia laboral; da mayor protección a la maternidad y define la de discriminación conforme a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Cedaw.
Ortiz alertó sobre la intención de legislar «al vapor» la ley laboral a unos cuantos días de que termine el segundo periodo de sesiones en la Cámara de Diputados.
Alfonso Bouzas destacó que las propuestas para la ley laboral carecen de una visión de género. Ejemplificó el pago de indemnización por la pérdida total o parcial del pene, disminución o pérdida de su función, que se indemniza del 50 al 100 por ciento, mientras que por la pérdida de un seno es el 20 o 30 por ciento.
El investigador de la UNAM opinó que la reforma debe ser para avanzar más no para retroceder «pues no se debe tirar por la borda toda la lucha de la clase trabajadora». Debe ser una reforma, –dijo–, con visión social y no empresarial como pretende el secretario del trabajo, Carlos Abascal.
El perredista Carlos López Angel, consideró que no existen actualmente condiciones legislativas y políticas para una reforma de esta naturaleza, aunque no descartó que pudiera haber una reforma parcial y regresiva debido a la actual correlación de fuerzas en el Congreso.
López Angel coincidió con Bouzas, sobre que en algún momento la reforma tendrá que producirse. Señaló que la iniciativa de la UNT-PRD retoma los derechos de las trabajadoras y a la de Abascal no le interesan las mujeres, pues busca fortalecer un modelo de relaciones laborales corporativo-antidemocrático y corrupto.
2003/SM/MAF
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