El presupuesto federal destinado a programas de salud para mujeres se reduce en un 60 por ciento para el año entrante, dejando de lado los cánceres cervico uterino y mamario, causantes de la muerte de 12 mujeres al día en México, coincidieron hoy especialistas al participar en el programa radiofónico Público y Privado.
La economista por la Universidad Iberoamericana, Lucía Clarisa Pérez Fragoso, y Orfe Castillo, directora de Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, expusieron el tema de los «Presupuestos en la recta final», donde analizaron la situación que se atraviesa y afecta directamente a las mujeres por el recorte a programas específicos destinadas a ellas.
Realizaron comparativos acerca de cómo el presupuesto carece de trasparencia, además de hacer a un lado las enfermedades que más afectan a las mujeres, como el cáncer cervico uterino y mamario, así como por carecer de programas con equidad de género.
«Los programas presupuestales están administrados en bolsas muy amplias, por lo que no se permite saber en qué se van a gastar los recursos. Esto crea una gran discrecionalidad, porque no hay claridad en los gastos» enfatizó, y puso como ejemplo el programa Oportunidades.
Entre los rubros que recibieron un pequeño aumento fue el Instituto Nacional de las Mujeres, que fue del 1.6 por ciento, mientras que no existe presupuesto para los programas Arranque Parejo en la Vida, Programa de la no violencia, y el Programa del cáncer cérvico uterino y mamario. Mientras que se destina y millón 380 pesos para las viudas de la revolución mexicana.
Castillo aseguró que las diputadas están luchando ahora porque exista claridad en los presupuestos. «El papel de las diputadas es básico ahora, es lamentable que la Secretaria de Salud no haya enviado un proyecto con equidad de género», puntualizó.
Las mujeres han sido de las más tenaces en querer demostrar hacia a dónde se dirigen los recursos del presupuesto, y ahora que se discute este tema «nos pagan con reducirnos los impuestos».
Mencionaron que en 2001 el presidente Fox prometió que los gastos serían reetiquetados, pero por lo visto esto sólo quedó en discursos, concluyeron las especialistas.
Expresaron su descontento ante el secretario de Salud Julio Frenk por no explicar satisfactoriamente los gastos destinados a programas de mujeres, así como el gran presupuesto que gozan organizaciones como Provida, que sólo «logran atemorizar a las mujeres», concluyeron las invitadas en el programa.
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