Un nuevo método abortivo ha ocasionando una gran polémica en diferentes países del mundo debido a que muchas personas afirman que podría salvar la vida de muchas mujeres que mueren anualmente a causa de un aborto, sin embargo otros dicen que es un arma asesina.
La píldora RU-486, que también es conocida por su nombre genérico como Mifepristone es una antihormona porque bloquea la producción de progesterona, hormona que el embrión necesita para implantarse en el útero. «Este medicamento es utilizado en combinación con otro llamado misoprostol, el cual causa contracciones del útero, ayudando así a la expulsión del huevo implantado».
Lo atractivo de esta píldora es que permite interrumpir el embarazo dentro de las primeras nueve semanas sin necesidad de hospitalización ni intervención quirúrgica.
Actualmente esta píldora se encuentra disponible en Francia, Inglaterra, Suiza, China, Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Alemania, Grecia y los Países Bajos. Sin embargo, en el continente Americano sólo está disponible en Estados Unidos; las mujeres latinoamericanas no tienen acceso a esta.
Los antiabortistas llaman a la RU-486 «el pesticida humano» porque la empresa central fabricante de esta píldora, la Hoetcher, empresa alemana, también fabricó el Zyklon B, gas utilizado en los campos de concentración nazis. De esta forma creen que esta permitirá un pequeño genocidio legal.
Por otra parte las instituciones que se encargan de controlar el índice de población, afirman que con la disponibilidad de la «píldora abortiva», el aborto será menos riesgoso para la salud de las mujeres en los países en vías de desarrollo.
Esto ayudaría a detener el crecimiento demográfico y a su vez evitaría gran parte de las 100 mil a 200 mil muertes que anualmente se pagan en diversos países por los abortos inseguros, quirúrgicos o clandestinos. Estas muertes se presentan en diferentes lugares del mundo y México no es la excepción.
Además, muchos grupos del movimiento feminista ven en la RU-486 el primer paso para que la mujer pueda constituirse de hecho en dueña absoluta de su capacidad reproductiva. Ya que cuando se disponga de una píldora abortiva segura, de libre dispensación y que el farmacéutico despache sin receta médica, esto además haría desaparecer los sentimientos de culpabilidad ligados al aborto.
05/HS/GM
