Comer en exceso grasas así como el consumo de alcohol y la obesidad, son factores asociados al cáncer de mama, el cual provoca actualmente, la muerte de una mexicana cada dos horas, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Salud (SS).
En un comunicado, la dependencia añade que en el 75 por ciento de los casos de cáncer de mama se detecta en etapas tardías, «cuando ya se diseminó en toda la glándula e incluso hacia otros órganos como pulmón, situación que elimina la posibilidad de curarlo».
Padecer cáncer, alerta la SS, no implica necesariamente que uno de los senos se va a perder ya que si se detecta a tiempo, hay más probabilidades de eliminar el problema y conservar la glándula mamaria.
Además existe una serie de mitos en la forma cómo se desarrolla el cáncer de mama, entre los que resalta el uso de implantes estéticos, los sostenes con varilla, antitranspirantes o el tener un seno más grande que otro. En ninguno de los casos mencionados se ha demostrado que sean causantes de cáncer.
Sin embargo, algunos factores que sí se han asociado con el cáncer de mama son las cremas reafirmantes del busto porque contienen «algún tipo de hormona» que produce una inflamación a nivel local y aplicarla en los senos periódicamente podría incrementar el riesgo de que aparezca un tumor maligno.
El consumir alimentos ricos en grasas y beber alcohol ocasionan cambios metabólicos que incrementan la presencia de hormonas lo que también favorece un clima apto para la degeneración de las células mamarias, señala el comunicado.
Otro factor que contribuye a desarrollar cáncer de seno es la obesidad por la relación entre la cantidad de tejido graso y la formación de «componentes hormonales» que facilitan la estimulación de la glándula mamaria, lo que la hace más susceptible para la formación de tumores malignos.
El tomar píldoras anticonceptivas por más de diez años ininterrumpidamente, también es otra causa de cáncer.
La Secretaría de Salud recomienda a las mujeres mayores de 35 años que se revisen periódicamente y se hagan una mastografía cuando el médico se los indique, ya que hasta ahora es la única forma de detectar alteraciones en el tejido mamario que son difíciles al tacto.
Un diagnóstico temprano permite una superviviencia de 10 años en el 90 por ciento de los casos y únicamente 2 por ciento en fase tardía.
06/LGL/LR/CV