Para el Tao curativo, propuesta difundida en el mundo por el maestro tailandés Mantak Chia, la limpieza de los órganos es vital para lograr desde el cuerpo un equilibrio interno en el ser humano.
Esta limpieza se hace en pulmones, riñones, hígado, corazón y bazo, a través de sonidos que estimulan a cada uno provocando que vibren y con ello la energía acumulada –que al estar en exceso puede enfermarlos— se transforme permitiendo tengan una vida sana.
Recordemos que la base del Tao curativo, desde una visión integral (holística) y vinculada a la energía del universo (los seres humanos venimos de las estrellas), está en tres conceptos esenciales: el chi (energía vital), el yin y yang (no como opuestos sino como dos energías integradas una en la otra) y los cinco elementos.
Desde esta perspectiva, en este último concepto los elementos básicos son: el metal, el agua, la madera, el fuego y la tierra, cada uno de ellos se relaciona, entre otras cosas, con un órgano, una estación del año, un color, un sentido y un sentimiento.
Para los taoístas los órgano internos tienen su propio espíritu y, desde el concepto del yin y yang, en ellos pueden habitar dos sentimientos en pares: tristeza/valentía en pulmones, miedo/gentiliza (confianza) en riñones, enojo/bondad en hígado, prisa y arrogancia/amor y apertura en corazón, víctima/justicia en bazo.
Antes de conocer la práctica de los sonidos curativos es importante que realices una observación en tu «yo soy corporal», de acuerdo a los siguientes pasos:
Toma conciencia de estos cinco órganos ubicando donde están y pregúntate cuál es su función (para qué sirven).Localízalos y tócalos dándote un masaje suave en la zona donde se encuentran.Registra qué llama tu atención y qué sensaciones te provoca cuando los tocas.Ubica si en algunos de ellos has tenido: alguna enfermedad, tensión, dolor o sentimiento.
Realiza esta breve exploración por cinco días, en la noche, antes de dormir y escribe la experiencia en tu Diario del Cuerpo.
En las siguientes entregas dedicaremos una columna a la práctica de los sonidos curativos, explicando cómo se hace la vibración conectando cada uno de los órganos con el sentido, estación del año, color y sentimiento que les corresponde.
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* Periodista, facilitadora de grupos con Enfoque Centrado en la Persona y Gestalt.
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