El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) instó a la comunidad de donantes a que reúnan 850 mil dólares en recursos de emergencia para asistir en materia de salud reproductiva a 250 mil víctimas del terremoto en Perú.
El organismo ayudará al país a mejorar sus servicios en este terreno y a concluir la evaluación de las necesidades en los pueblos montañosos más aislados.
Además, proveerá a las comunidades afectadas con botiquines y otros elementos para garantizar partos seguros a unas 800 mujeres cada mes, explicó Esteban Caballero, representante del UNFPA en ese país.
«Hemos desarrollado dentro del Fondo de Población un elemento de mucha ayuda que se llama un kit de la dignidad, que es un paquete que tiene elementos para la higiene de la mujer, como toallas sanitarias», dijo. Agregó que muchas veces no se contemplan cosas tan obvias como ésta.
Los recursos que el Fondo de Población requiere también contribuirán a establecer 15 centros comunitarios, 12 campamentos y unos 35 mil refugios para personas que hayan perdido sus hogares por el terremoto.
Los centros brindarán protección a grupos vulnerables, como mujeres, niñas, ancianos y gente con discapacidades, amenazados por violencia de género. En ellos se les dará protección legal, y atención médica y psicológica.
Los fondos ayudarán a restaurar y a consolidar los servicios médicos primarios locales luego del terremoto del 15 de agosto, que tuvo una intensidad de 7.9 grados en la escala de Richter.
El UNFPA asistirá al país en mejorar los servicios médicos reproductivos de emergencia, y ayudará a concluir una rápida evaluación de los servicios médicos locales, particularmente en aisladas aldeas rurales montañosas.
La organización también proveerá a las comunidades afectadas los suministros y equipos de salud reproductivos de emergencia para asegurar que 800 mujeres por mes den a luz con seguridad. Estas actividades beneficiarán a un total de 50 mil mujeres y niñas en edad reproductiva, incluyendo a 15 mil mujeres embarazadas.
Los fondos de emergencia también ayudarán a establecer 15 centros comunitarios dentro y cerca de 12 campos y entre aproximadamente 35 mil refugios para gente que perdió sus casas en el terremoto.
Los centros proporcionarán equipos de higiene y ofrecerán protección a los grupos vulnerables, tales como mujeres, niñas, adultos mayores y lisiados, y proporcionarán servicios legales, médicos, psicosociales, vocacionales y contra la violencia de género según la necesidad.
En cooperación con el Instituto Nacional de Estadística e Información de Perú y autoridades locales, el UNFPA ayudará a realizar un censo de la población afectada por el terremoto. El censo identificará y registrará el número de gente así como las pérdidas sufridas por cada familia. También proporcionará información con respecto a daños a los servicios comerciales, industriales e institucionales y ayudará a determinar el acceso a los servicios básicos.
UNFPA ya ha asignado 90 mil dólares estadounidenses que se están utilizando para proporcionar 6 mil equipos de higiene de emergencia entregados en la provincia de Cañete esta semana, y financiar la iniciación de un censo de emergencia de la población afectada.
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