La vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) debe incorporarse al cuadro básico de medicamentos de México y aplicarse a la población femenina a través de las jornadas nacionales de vacunación, indica un punto de acuerdo presentado el pasado 16 de julio en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
El punto de acuerdo, presentado por la diputada Leticia Quezada Contreras, presidenta de la Comisión de Equidad y Género de la ALDF, y por Humberto Morgan Colón, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), hace un llamado al titular de la Secretaría de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, para que una vez aprobada la incorporación de dicha vacuna al cuadro básico de medicamentos, se realice una campaña de promoción y difusión que permita a la ciudadanía conocer los alcances de la vacuna y los beneficios de la misma.
Indicó Morgan Colón que corresponde a la Secretaría de Salud ejecutar, a través del Sistema Nacional de Salud, las medidas necesarias para la correcta vigilancia epidemiológica y se prevenga que mujeres y hombres contraigan el VPH.
Se exhorta también a la Cámara de Diputados para que apruebe y destine, del próximo Presupuesto de Egresos 2009, los recursos necesarios para la adquisición, distribución y aplicación de la vacuna.
El programa expandido de inmunización de la Organización Panamericana de Salud (OPS) de las Américas refiere que el cáncer cervicouterino es una secuela o efecto infeccioso del VPH de la mayor importancia para la salud pública. Y estima la OPS que más de 37 mil 600 muertes se producen en América Latina y el Caribe debido al cáncer cervicouterino.
De acuerdo a las cifras proporcionadas por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), durante el 2004 se registraron en México 4 mil 245 decesos por Cáncer Cervicouterino, lo que representa el 13.5 por ciento de defunciones por cáncer, y en el Distrito Federal el mismo año se presentaron 377 muertes por este mal.
Destacó el diputado Morgan Colón que el Virus del Papiloma Humano no es un problema de mujeres sino un problema de salud pública, pues intervienen mujeres y hombres como portadores, como madres y padres, hermanas o hermanos, amigas, amigos o parejas de quienes lo padecen, por lo que es una responsabilidad compartida.
Consideró el diputado del sol azteca, que los representantes populares tienen la responsabilidad de divulgar las posibles soluciones y la búsqueda de una mejor atención a los portadores. Este virus, puntualizó, es una enfermedad silenciosa que cualquiera puede padecer, ya que permanece en las personas por largo tiempo sin que se manifieste síntoma alguno.
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