Las ocho mujeres que denunciaron ante la Fiscalía Especializada de Delitos Violentos contra las Mujeres (Fevim, hoy Fevimtra) haber sido abusadas sexualmente y torturadas por elementos policíacos estatales y federales durante operativos en San Salvador Atenco y Texcoco, Estado de México, el 2 y 3 de mayo de 2006, informan que no existe avance en el caso ni consignación de alguno de los probables responsables.
Advierten también a través de un comunicado sobre la integridad física y psicológica de María Patricia, otra de las víctimas, quien permanece encarcelada, pues aún presenta secuelas de los golpes que le fueron propinados por agentes policíacos y su salud puede deteriorarse si no es tratada adecuadamente. En este sentido, exhortan al Director del Centro Preventivo y de Readaptación Social de Texcoco a velar y garantizar la seguridad e integridad de ella.
Señalan las mujeres que los procesos instaurados en su contra por delitos tales como ataque a las vías de comunicación, secuestro equiparado, lesiones, entre otros, han pasado por tres juzgados diferentes, ocasionándoles desgaste físico, económico y moral.
«Hay procesos que aún enfrentamos algunas de nosotras por ataques a las vías de comunicación cuando en autos consta que nunca estuvimos en la carretera de Lechería sino en Texcoco», afirman Mariana, Georgina Edith, Norma Aidé, Claudia, Bárbara Italia, Ana María, Yolanda y Cristina.
Y recuerdan que aunque casi todas enfrentaron los cargos en libertad bajo caución, y hay quienes fueron absueltas, María Patricia aún se encuentra recluida en el Centro Preventivo y de Readaptación Social de Texcoco, conocido como Molino de Flores.
Ella, junto con su padre, hijo y diez compañeros llevan más de dos años en prisión. Al día de hoy se encuentra cerrada la instrucción dentro de su procesos llevado ante el Juez Tercero y Primero de lo Penal de Texcoco y actualmente están vistos para sentencia.
Exhortan por ello a los jueces Primero y Tercero de lo Penal de Texcoco a que no utilice más tiempo del necesario para dictar sentencia dentro de los expedientes 298/2007 y 58/2007 y que la misma sea apegada a derecho. De ser así, María Patricia y las demás personas recuperarán la libertad que le arrebataron hace más de 26 meses.
Agradecen asimismo la solidaridad de todas las personas que se han indignado y se han manifestado contra los abusos, violaciones y tortura que sufrieron más de doscientas personas el 3 y 4 de mayo de 2006 en San Salvador Atenco y Texcoco y que les han demostrado su apoyo, a nivel nacional e internacional.
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