En los últimos años se ha incrementado el número de mujeres en Tamaulipas que viven con el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) o con el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).
En lo que va del 2008 se han detectado 541 casos de personas que viven con SIDA en la entidad, de los cuales 406 son varones y 135 son mujeres, la mayoría de ellas amas de casa que adquirieron el virus a través de relaciones sexuales con sus esposos.
De las 844 personas que actualmente se encuentran bajo tratamiento en el estado, 366 son mujeres y 478 son hombres.
Cuando el VIH llegó a Tamaulipas a finales de los años 80, había solo una mujer viviendo con el virus por cada 25 casos de hombres. En la actualidad por cada tres hombres hay una mujer contagiada.
De acuerdo a los datos proporcionados por el Coordinador del Programa VIH/SIDA de la Secretaría de Salud del estado, Alejandro Cortéz, la mayoría de los casos de SIDA se están detectando en personas en edad productiva, entre los 25 y 44 años de edad.
De los 541 casos presentados de enero a octubre del 2008, 6 corresponden a personas menores de 15 años, 91 entre los 15 y 24 años, 335 entre los 25 y 44 años de edad, 105 entre los 45 y 64 años y 5 pacientes tienen más de 65 años.
La jurisdicción de Tampico es la que registra mayor incidencia de casos de SIDA este año con 205, seguida por Reynosa con 139, Laredo con 80, Victoria con 59, Matamoros con 43 y Mante con 15. Jaumave y San Fernando no han reportado casos diagnosticados este año.
A diferencia de lo que se pensaba, la mayoría de las personas infectadas son heterosexuales con 330 casos, seguido por homosexuales con 115, 90 bisexuales y 6 de origen perinatal.
Del año 2000 a octubre del 2008 fallecieron en Tamaulipas 609 personas victimas de esta enfermedad, de los cuales 240 murieron en la jurisdicción de Tampico con 240 decesos reportados, seguida por Reynosa con 173, Matamoros 82, Nuevo Laredo 57, Victoria con 29 y Mante 26.
DISCRIMINACION Y RECHAZO SOCIAL
Para las personas que viven con VIH/SIDA, el mayor problema no es sólo la enfermedad, sino enfrentar el rechazo y la discriminación que la sociedad, por ignorancia, manifiesta ante quienes lo padecen.
Para Linda, a quien le diagnosticaron hace varios años la enfermedad cuando tenía escasas semanas de embarazo y adquirió el virus por su pareja, no ha sido fácil lidiar con estos prejuicios de la sociedad.
«He tenido que callar mi enfermedad, no por el miedo a lo que digan de mí, sino para proteger a mi familia, para que mis hijos no sean rechazados en la escuela o en su círculo de amistades».
Hay ciudades de México, como Cancún, donde la discriminación y el rechazo ha llegado al grado de obligar a crear guarderías para hijas e hijos de pacientes que viven con SIDA, porque no son aceptados en otras escuelas, pero eso no es lo ideal porque los estigmatizas»
Vivir con SIDA es muy desgastante emocionalmente, y si emocionalmente no estás bien, la enfermedad avanza y la soledad te acaba. Nunca más vuelves a tener una pareja yno puedes abrirte a la sociedad por su mentalidad cuadrada», lamenta.
MARIDOS CONTAGIAN A ESPOSAS
El número de mujeres que viven con VIH o SIDA ha aumentado en Ciudad Victoria y todas han adquirido el virus por sus esposos, dijo la presidenta de la Asociación Civil concepto VIH/SIDA, Sonia González Ruiz.
En la mesa de medios «Violencia de Género, Sida y Derechos Humanos de las Mujeres» organizado por la Red de Mujeres Periodistas de Tamaulipas AC, la activista social aseguró que la mayoría «Son mujeres que están en su casa, tienen baja autoestima, dependen económicamente de sus maridos y no tienen decisión sobre ellas mismas», consideró.
Incluso, dijo, muchas de estas mujeres, además de sufrir violencia sexual, también viven violencia económica, por lo que es necesario seguir trabajando en su empoderamiento. Que conozcan sus derechos, que sean autosuficientes, que tomen decisiones sobre su vida sexual y que tengan acceso al condón femenino. Muchas de estas mujeres que hoy viven con la enfermedad, son doblemente víctimas, porque tienen que hacerse cargo de la atención del marido que las contagió, finalizó González Ruiz.
08/RRQ/GG