El Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), certificado en el 2009 como Modelo de Equidad de Género MEG:2003, que concede el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), despidió a una de sus trabajadoras por estar embarazada.
Lucero de Belem Zamora, quien tenía el puesto de Enlace A en el área de crédito de la delegación Oaxaca del Infonavit, denunció que fue despedida el 6 de diciembre de 2010 por la delegada Diana Félix Andrade, quien –a decir de la trabajadora–argumentó que el embarazo representaba una «carga económica» para el instituto.
Por estos hechos, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) abrió el expediente CNDH/4/2011/5266/Q, según el oficio 40993 con fecha del 27 de junio de 2011 enviado a la afectada. En el documento, el organismo señaló que iniciará las investigaciones y trámites correspondientes.
Lucero de Belem relató que fue obligada a firmar su renuncia bajo amenazas. Detalló que Ignacio Ruiz Vázquez, quien trabaja para la contraloría del instituto, le advirtió que «me fincarían alguna responsabilidad para que en lo futuro no volviera a tener la oportunidad de laborar en el Infonavit».
Abundó: «No había una razón para despedirme de mi fuente de empleo, nunca di motivo, siempre fui íntegra en mi trabajo. Mi situación de embarazo no le interesó al contralor; me manifestó tajantemente que estaba para cumplir una orden de la delegada Diana Félix Andrade».
Al momento de ser despedida, Lucero tenía cinco años de antigüedad en el empleo y cumplía el primer mes de su segundo embarazo.
Tras la rescisión de su contrato, Belem interpuso el 10 de mayo de 2011 una demanda laboral ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje Especial número 32, la cual fue ratificada en el expediente 276/2011.
La demanda está en proceso de conciliación y será a mediados de este mes cuando se reúnan las partes en conflicto.
La trabajadora demanda la reinstalación en su cargo, así como el pago de sueldos caídos desde su renuncia obligada hasta el momento en que sea reinstalada. «Están pisoteando mis derechos. No estoy pidiendo nada fuera de lo común, sólo quiero regresar a mi trabajo. No pido más de lo que la ley debe de otorgarme», dijo.
La mujer, de 30 años de edad, tiene una hija y está a tres semanas de parir a la segunda. Desde su despido hasta la fecha lleva casi nueve meses desempleada. «Es muy difícil para una mujer embarazada tener todo lo que necesita para sus hijas», lamentó.
Con este despido el Infonavit contravino el artículo 11, punto 2, inciso a de la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés), signada por México, y que prohíbe el despido de cualquier trabajadora en estado de gravidez.
El artículo 123 constitucional estipula en el numeral V del apartado A, que «las mujeres durante el embarazo (…) gozarán forzosamente de un descanso de seis semanas anteriores a la fecha fijada aproximadamente para el parto y seis semanas posteriores al mismo, debiendo percibir su salario íntegro y conservar su empleo y los derechos que hubieren adquirido por la relación de trabajo».
El 13 de agosto de 2009 el Infonavit recibió la certificación en el Modelo de Equidad de Género MEG:2003, que concede el Inmujeres.
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