Demandan reconsiderar anulación de condena contra Ríos Montt

La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) solicitó a la Corte de Constitucionalidad (CC) de Guatemala reconsiderar la anulación de la condena de 50 años por genocidio y 30 por lesa humanidad contra al ex dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt, el pasado 10 de mayo.
 
Ayer, la FIDH –integrada por 178 organizaciones de Derechos Humanos (DH) de los cinco continentes– presentó en el país centroamericano el informe “Genocidio en Guatemala: Ríos Montt culpable”, basado en las dos misiones de observación que realizó durante el juicio celebrado entre marzo y mayo pasados. 
 
La anulación de la condena emitida por la jueza del Tribunal A de Mayor Riesgo, Jazmín Barrios, representa una flagrante violación del derecho a la verdad, la justicia y un atentado contra las víctimas de crímenes internacionales, afirmó la FIDH.
 
Por lo que solicitó se reconsidere la decisión de la CC del pasado 20 de mayo, cuando se ordenó reponer el proceso a partir de la audiencia del pasado 19 de abril (cuando se estaba en el desahogo de pruebas), con lo que se deja sin efecto la condena.
 
Recordó que la sentencia –dictada tras escuchar más de 90 testimonios y analizar diversos peritajes realizados por expertos–  determina que el ex dictador “supervisó, permitió y autorizó los ataques sistemáticos contra la población indígena ixil que vio violados sus DH de forma planificada y sistemática”.
 
En este contexto, la FIDH exhortó a las autoridades federales a no revictimizar a las y los sobrevivientes de las masacres cometidas entre 1982 y 1983 –cuando mediante un golpe de Estado Ríos Montt estaba al frente del país– que acudieron a dar su testimonio, obligándolas a volver a declarar.
 
Cabe recordar que entre los testimonios están las declaraciones de una decena de mujeres de la etnia ixil sobrevivientes de agresiones sexuales perpetradas por elementos del Ejército guatemalteco.
 
La Federación, con sede en París, Francia, concluyó que el juicio fue un testimonio de “la resistencia y el coraje de las víctimas”, pues después de tres décadas de impunidad y negación oficial de los hechos se atrevieron a denunciar.
 
Manuel Ollé Sesé, presidente de la asociación Pro Derechos Humanos de España y observador del juicio, afirmó en el documento que la “verdad que no se olvida es la que destroza vidas y personas y ofende la esencia misma de la humanidad. La justicia es lo único que puede devolver, en parte, la dignidad arrebatada a todas las víctimas”.
 
La FIDH también urgió a fortalecer los Tribunales de Alto Riesgo, ya que fueron creados como un microsistema para garantizar la independencia del Poder Judicial en casos de gran envergadura entre los que se encuentran las violaciones a los DH. 
 
Ríos Montt fue sometido a juicio el pasado 19 de marzo junto con su ex jefe de inteligencia militar, José Mauricio Rodríguez Sánchez, ambos acusados de los delitos de genocidio y lesa humanidad por las matanzas cometidas entre 1982 y 1983, en las que murieron mil 771 indígenas de la etnia Ixil; se calcula que 25 por ciento de las víctimas fueron mujeres.
 
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