Ciudad de México. A más de 2 años y 5 meses del asesinato de Zyanya Estefanía Figueroa Becerril, el caso sigue impune ya que las autoridades poblanas siguen sin realizar una adecuada investigación de los hechos y han intentado cerrar el caso argumentando que la joven se suicido, así lo declararon familiares de Estefanía e integrantes del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF).
Zyanya Estefanía Figueroa Becerril era una joven de 26 años de edad, quien se desempeñaba como médica pediatra residente del Hospital del Niño Poblano. El 15 de mayo de 2018 fue encontrada sin vida y con señales de violencia en su cuerpo, en la casa que habitaba en Puebla. Sin embargo las autoridades se niegan a iniciar una averiguación por feminicidio y sus acciones sólo han entorpecido el caso.
El abogado que lleva el caso, Carlos Humberto Olvera, explicó en entrevista con Cimacnoticias que la joven fue encontrada con 17 heridas en los brazos, golpes en las rodillas y piernas, y cortadas en las muñecas. En el lugar de los hechos había más de 70 indicios de pruebas, entre jeringas, sangre, y demás que pudieron acreditar cómo el asesinato de Zyanya fue violento.
En este sentido dijo que las autoridades sólo recabaron 3 indicios: una computadora, un celular y una laptop de los 70 que había, no acordonaron todo el lugar de los hechos, sólo un baño y una habitación, por lo que la familia de Zyanya tuvo que seguir pagando la renta de la vivienda para que ésta no fuera habitada ni limpiada.
En suma, añadió, las autoridades no aplicaron un protocolo para saber si la joven sufrió de violencia sexual, en la necropsia definen dos causas de muertes, una de suicidio y otra de intoxicación, que según Olvera son contrarias; y enfatizó que las marcas encontradas en el cuerpo de la joven no concuerdan con un suicidio.
Si la joven se hubiera suicidado “las livideces (marcas por ahorcamiento) deben estar en las extremidades, pero Zyanya no las tiene ahí, entonces no cuadra con el suicidio que plantean las autoridades”, agregó. Por tales omisiones, aclaró, el caso es examinado por otros tres peritos, quienes también afirmaron que todo el proceso “está mal” y temen que debido al tiempo se hayan perdido pruebas fundamentales.
En un comunicado, el OCNF resaltó que la Fiscalía de Puebla no cuenta con un plan metodológico de investigación con perspectiva de género y contrario a los estándares nacionales e internacionales, las autoridades han intentado sostener una hipótesis de suicidio, lo que dijeron, violentó la debida diligencia y la perspectiva de género.
Recordaron que luego de la sentencia del caso de Mariana Lima, mujer asesinada en el 2010 en el Estado de México, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) estableció que “toda muerte violenta de mujeres tiene que ser investigada de inicio como feminicidio”, cuestión que las autoridades de Puebla no han hecho.
Ante ello, enfatizaron que desde ya se determine que sí hubo razones de género y violencia sexual en la causa de muerte de Zyanya así como subsanar las graves omisiones desempeñadas durante la averiguación y emprender una indagación seria y científica que garantice la verdad histórica de los hechos y repare el daño a la familia de la joven.
Cabe recordar que el 16 de octubre la familia de Zyanya junto con el OCNF presentaron ante un juez del Centro de Justicia Penal de Puebla un documento que registra todas las deficiencias en la investigación del caso con el fin de hacer presión y se haga justicia pronto a la memoria de Zyanya Estefanía.
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