Jalisco.- La noche de este martes 11 de julio, un grupo de policías y personal de la Fiscalía de Jalisco fue atacado cerca de la cabecera municipal de Tlajomulco. Al dar cuenta sobre los hechos, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez involucró a una integrante de los colectivos de madres buscadoras; además, anunció la suspensión de las labores de búsqueda por parte de las autoridades en la entidad. Las Madres Buscadoras de Jalisco emitieron su postura al respecto este miércoles y aseguraron que las declaraciones del gobernador buscan intimidarlas. De igual forma, señalaron que —contrario a lo afirmado por Alfaro— ellas no reciben apoyo de parte del gobierno para realizar sus labores de búsqueda.
En una declaración emitida este martes 12 de julio, Enrique Alfaro explicó que el ataque consistió en la detonación de seis artefactos explosivos caseros cerca de un vehículo en el que viajaban agentes de la policía municipal de Tlajomulco y personal de la Fiscalía General de Justicia de Jalisco. Hasta el momento, aseguró que el saldo de este ataque es de seis personas muertas y 12 heridos.
Al explicar “lo que hay detrás de este terrible hecho”, el gobernador —miembro de Movimiento Ciudadano, MC— aseguró que todo se debió al llamado de una ciudadana “que participa en los colectivos de madres buscadoras”. De acuerdo con la versión de Alfaro, esta mujer recibió una llamada anónima que la alertó sobre presuntos restos humanos en el punto al que acudieron las autoridades. Sin embargo, de acuerdo con el mandatario, todo se trataba de una trampa de grupos del crimen organizado.
Enrique Alfaro Ramírez no culpó directamente a la presunta madre buscadora por el asunto ni indicó que ella formara parte de quienes tendieron la supuesta trampa. Aun así, su omisión de información al respecto no deja de resultar estigmatizante para la labor de los colectivos de búsqueda, pues las declaraciones del funcionario insinúan que las autoridades se ponen en riesgo gracias a dichas agrupaciones.
A este estigma se suma, además, la suspensión de los trabajos de búsqueda de personas desaparecidas por el ataque cometido en Tlajomulco. En la misma declaración de este 12 de julio, Alfaro declaró que “con el pronóstico de cuidar a las buscadoras” y “para no exponerlas” se decidió suspender los procesos de búsqueda de parte de las autoridades para revisar los protocolos al respecto y definir una ruta a seguir que no ponga en riesgo ni a las activistas ni a las autoridades.
Madres Buscadoras exhiben abandono del gobierno de Enrique Alfaro
Tras las declaraciones del gobernador jalisciense, las Madres Buscadoras de Jalisco emitieron un comunicado en el que niegan estar relacionadas de cualquier forma con los hechos acontecidos en Tlajomulco. Por otra parte, a través de Facebook, el colectivo explicó que ninguna de sus integrantes recibió la supuesta llamada a la que se refirió Enrique Alfaro y explicó que ellas tampoco hicieron alguna llamada a las autoridades para pedirles ayuda en la localización de presuntos restos humanos.
De igual manera, al responder a los comentarios de una usuaria de la red social, el grupo de búsqueda explicó que, en primer lugar, ellas nunca salen a realizar jornadas nocturnas por cuestiones de seguridad. Por otro lado, las madres buscadoras afirman que parte de su proceso de búsqueda sí implica comunicarse con las autoridades; sin embargo, aclaran que esto se hace una vez que ya se localizó alguna fosa en el lugar. Esta forma de proceder, por lo tanto, desmiente por sí misma la versión de Enrique Alfaro.
El gobernador también aseguró que la supuesta respuesta de las autoridades ante el presunto llamado de la mujer buscadora es lo cotidiano, lo que siempre se ha hecho desde su gobierno. Pero esto también ha sido desmentido por las Madres Buscadoras de Jalisco, y no solo tras el ataque en Tlajomulco.
Apenas el 17 de junio de este año (es decir, hace cerca de un mes) el colectivo denunció ante un medio de internacional que el martes 30 de mayo sus integrantes encontraron varios cuerpos enterrados a medias en un predio, justamente, de Tlajomulco. Dieron aviso a las autoridades y se retiraron para regresar dos semanas después y encontrarse con que éstas nunca llegaron al lugar. También se percataron de que junto a los cuerpos enterrados había incluso otra fosa más grande que la primera.
Días después, el pasado 4 de julio, el colectivo de búsqueda dio con otra fosa en Tlajomulco, en la localidad de San Lucas Evangelista. Aunque las autoridades sí acudieron al llamado en esta ocasión, apenas este 10 de julio (un día antes del atentado contra la policía y el personal de la Fiscalía), las madres buscadoras denunciaron que las autoridades no les han permitido el acceso a la zona y se han negado a darles información al respecto. Esto, a pesar de que el protocolo del Sistema Nacional de Búsqueda establece que las familias tienen derecho a participar conjuntamente con el personal de las entidades cuando se localiza una fosa.
“Si crees que corremos peligro Enrique Alfaro Ramírez, danos la protección que merecemos por hacer tu trabajo”, aseveraron las Madres Buscadoras de Jalisco tras las declaraciones del gobernador. Las omisiones de su gobierno ante las labores de localización de personas evidencia que, pese a lo declarado por el gobernador públicamente, no hay un interés real en atender las necesidades de las familias de miles de personas que han sido desaparecidas en Jalisco.
De acuerdo con el Registro Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO), entre el 1 de enero de 1962 y el 13 de julio de 2023 han desaparecido a 14 mil 906 personas en el estado de Jalisco. Tlajomulco ocupa el tercer lugar en los municipios con el mayor acumulado de estas desapariciones, con un total de mil 351 personas desaparecidas y no localizadas hasta ahora.
En sus labores (aquellas que realizan aun pese a la falta de apoyo de los gobiernos), los colectivos de búsqueda intentan localizar a estas personas con vida o muerte; de ahí que parte de su trabajo sea también el descubrimiento de fosas clandestinas. Según datos del Registro de fosas clandestinas operado por la Comisión Nacional de Búsqueda, entre el 13 de diciembre de 2018 y el 24 de abril de 2023, en Jalisco se han localizado 136 de estas fosas.
Ante el anuncio de la suspensión de las labores de búsqueda por parte de las autoridades en Jalisco, las Madres Buscadoras deberán seguir sus esfuerzos en estas fosas por su cuenta. Porque el tiempo es local para localizar a una persona desaparecida, pero el gobierno parece no comprender este mensaje ni tener los protocolos que —asegura Alfaro— deben revisarse.
