La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) admitió para su revisión el caso de Lilia Alejandra García Andrade, joven de 17 años asesinada en Ciudad Juárez, Chihuahua, en 2001.
Este caso podría pasar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH), por lo que el Estado mexicano eventualmente se haría acreedor a una nueva sentencia por su inacción e incapacidad para frenar el feminicidio que desde 1993 azota la urbe fronteriza con Estados Unidos.
El pasado 10 de mayo, el organismo dependiente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) notificó a Norma Andrade, madre de Lilia Alejandra, que revisará el caso, por lo que se inicia un procedimiento en el que las y los defensores de la víctima y el Estado mexicano deben brindar a la CIDH información sobre las investigaciones del crimen.
La abogada Karla Michel Salas, representante legal de Norma Andrade, confió en que la Comisión valore y analice que el Estado mexicano no ha avanzado en las pesquisas de este caso, y que tampoco ha cumplido la sentencia emitida en 2009 por la CoIDH por el caso Campo Algodonero, predio de Ciudad Juárez donde fueron encontrados los restos de ocho mujeres en 2001.
Michel advirtió que en su momento la CIDH podría valorar la pertinencia de que el caso de la joven Lilia Alejandra llegue ante la Corte Interamericana.
Norma Andrade, fundadora de la organización civil Nuestras Hijas de Regreso a Casa ?pionera en la denuncia del feminicidio en Chihuahua?, dijo a Cimacnoticias que está «muy satisfecha» con la notificación, toda vez que es una nueva oportunidad para evidenciar que el Estado mexicano «no hace nada» para resolver las desapariciones y asesinatos de mujeres.
En 2002 la madre de Lilia Alejandra presentó ante la CIDH la solicitud para que el Sistema Interamericano de Justicia revisara el caso de su hija asesinada, en virtud de la falta de investigación y sanción a los responsables por parte del gobierno de Chihuahua.
«Este 10 de mayo fue una muy buena noticia, ya que es una lucha que emprendimos desde el asesinato de mi hija. Después de tocar puertas y darme cuenta de que en México no se me iba ayudar», destacó Andrade.
«Para mí y para todas las madres que estamos en la misma situación es un paso muy grande», afirmó la activista, quien en diciembre de 2011 tuvo que dejar Ciudad Juárez, luego de sufrir un atentado.
Karla Michel Salas subrayó que con la admisibilidad del caso de Lilia Alejandra por parte de la CIDH se colocan de nuevo sobre la mesa el feminicidio en Juárez, y la falta de mecanismos de prevención y atención sobre las desapariciones de mujeres.
Agregó que ante el Sistema Interamericano también se insistirá en la situación de riesgo en la que se encuentra Norma Andrade, quien por exigir justicia ha sufrido dos atentados que las autoridades mexicanas tampoco han esclarecido. Asimismo se denunciarán los ataques que han sufrido familiares de víctimas y activistas contra el feminicidio, enfatizó la abogada.
LA HISTORIA
Lilia Alejandra García Andrade era madre de una niña y un niño. Desapareció el 14 de febrero de 2001. Al día siguiente, Norma Andrade interpuso una denuncia.
El 19 de febrero de ese año, una mujer habló a la línea 060 y le dijo a la policía que una joven corría desnuda en la calle y que era agredida por un sujeto, según contó Karla Michel.
«Las autoridades no acudieron. Dos días después (21 de febrero) el cuerpo de Lilia fue encontrado en un lote baldío con signos de violencia sexual. Ella estuvo en cautiverio más de una semana. Las autoridades no investigaron a pesar de que en ese momento ya se tenía el Protocolo Alba ?para localizar a personas desaparecidas?, y que por supuesto no fue implementado de manera adecuada», denunció la abogada.
En 2002 también se presentó ante la CIDH el caso de Silvia Elena Rivera Morales, de 17 años de edad y que desapareció en julio de 1995, en Ciudad Juárez. Su cuerpo fue encontrado en septiembre de ese mismo año. Este crimen está en espera de ser admitido para su análisis.
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