Conmoción, indignación e impotencia ha provocado el asesinato de la joven feminista Elda Veraliz Ramos, integrante de la Asociación Nacional de Regidoras, Síndicas y Alcaldesas Salvadoreñas (ANDRYSAS), la noche del pasado 15 de junio en Ciudad Delgado, El Salvador.
De acuerdo con información proporcionada por la asociación, Veraliz Ramos, de 23 años, ya había denunciado anteriormente a su ex pareja, Ricardo Augusto Cruz Martínez, por violencia y se negaba a volver con él, a pesar de la insistencia del hoy criminal.
En la noche del 15 de junio, Elda nuevamente rechazó la petición de Cruz Martínez para irse con él a un motel. Ante la negativa, el asesino le clavó un desarmador que le perforó corazón y pulmón; la profunda lesión provocó la muerte de la joven.
El hijo de ambos, Daniel, de 9 años, presenció el crimen cometido por su padre. Debido al shock producido por el brutal asesinato, el niño actualmente se encuentra internado en el Hospital Bloom.
Para ANDRYSAS, «este es otro ejemplo más de la violencia feminicida y machista que día a día ataca y violenta a miles de mujeres de nuestro país, y que, como en el caso de Elda, termina con su muerte».
Hasta el momento, el asesino sigue prófugo. La organización hizo circular su fotografía vía internet, con el fin de colaborar a su pronta aprehensión y enjuiciamiento.
El cuerpo de Elda Veraliz Ramos fue velado en la Casa Comunal de Ciudad Delgado, El Salvador.
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