La periodista Graciela Atencio denunció hoy a la directora del Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO), Norma Reyes Terán, de haberla amenazado con deportarla de México y adelantó la posibilidad de una mala utilización de recursos públicos de un programa financiado por Instituto de Desarrollo Social (INDESOL), por lo que solicitó que las organizaciones civiles soliciten una auditoría.
En conferencia de prensa, la periodista, de origen argentino, explicó que fue contratada en febrero pasado por la titular del IMO, cargo al que renunció el 30 de octubre porque no podía seguir trabajando para un gobierno que «optó por la represión para acabar con un conflicto político grave y profundo», luego de que un día antes la Policía Federal Preventiva (PFP) había tomado el zócalo de la ciudad de Oaxaca en respuesta a las movilizaciones de la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca (APPO).
Reyes Terán mandó con una tercera persona a amenazarme con que me deportaría a mi país, incluso me mandó vigilar y prohibió a algunas de mis ex compañeras de trabajo tener contacto conmigo, explicó la periodista y feminista, quien además expuso que varias de esas trabajadoras del IMO han sido amenazadas con perder el trabajo.
LAS CIFRAS
Señaló también la periodista, ex colaboradora de Amnistía Internacional, sobre la presunta malversación de recursos públicos autorizados por el INDESOL para la aplicación de un programa denominado Prevención y Atención a la Violencia Contra las Mujeres en el estado de Oaxaca, para el cual la titular del IMO requirió de dos millones de pesos.
Graciela Atencio sostiene que en la copia del documento enviado por el IMO a INDESOL «se justifica parte de la propuesta? que incluye una actividad de Fortalecimiento y Profesionalización Institucional, marco en el que se desarrolló el diplomado que diseñé, coordiné e impartí ?hasta que se me prohibió culminar-, que en el proyecto se tituló Estandarización de bases y procedimientos para la atención de la Violencia de Género contra las Mujeres (mal redactado el título) y que en realidad se denominó en la convocatoria pública con el título original, de mi autoría, La República de las Mujeres».
De acuerdo con el documento de solicitud a INDESOL, cuya copia fue distribuida a los medios, se solicitaron 490 mil pesos, de los cuales se utilizaron 310 mil pesos «para la adquisición de equipos de cómputo y video, y diseño e impresión del material didáctico y 180 mil más para el pago de honorarios de servicios profesionales».
En ese sentido, añadió, únicamente puede constatar la renta del local a una universidad privada, por 30 mil pesos, y alrededor de 26 mil pesos en la elaboración de 60 copias fotostáticas de compendios bibliográficos para las alumnas del diplomado (otras 40, en su mayoría trabajadoras del IMO, sólo recibieron copias digitalizadas), además de los gastos de diseño e impresión de invitaciones, cuyos costos no habrían superado los cien mil pesos. Por eso, solicitó una auditoría sobre la disposición del dinero que INDESOL habría autorizado a la titular del IMO.
En una carta dirigida a Norma Reyes y cuya copia también fue distribuida por la periodista en la conferencia de prensa, Atencio expone: «Desconozco del dinero solicitado bajo tu responsabilidad, Norma, cual fue el monto autorizado por INDESOL. Pero sí quiero dejar claro ante la opinión pública que, como coordinadora y responsable del diplomado, no percibí un solo centavo de esa dotación de dinero. Y?, salvo la ponente Luz Vega, que me reemplazó en la penúltima clase? no se efectuaron pagos de honorarios de servicio profesional a otras ponentes?»
POLÍTICA Y REALIDAD
«No comprendo el abismo que existe entre el diseño de políticas públicas y lo que luego se lleva a cabo en la realidad, pues falta menos de un mes para que concluya el proyecto autorizado por INDESOL y no hay acuerdos interinstitucionales con otras instancias del gobierno para la prevención y atención de la violencia de género», sostiene la periodista y feminista.
Tampoco, agrega, hay indicadores que midan la calidad, eficiencia y cobertura de la campaña contra la violencia de género, ni acuerdos firmados con los municipios de Oaxaca, Tuxtepec, Tehuantepec, Huatulco, Tlaxiaco, Huautla de Jiménez, Salina Cruz, Tlacolula, San Pedro Mixtepec y San Jerónimo Coatlán, como señala el proyecto presentado ante INDESOL.
La activista por los derechos humanos señaló que si no hubiera sido amenazada con ser deportada habría ella misma solicitado una auditoría, para saber cómo se utilizó el dinero. «Como se me ha vedado esa posibilidad», pidió a las organizaciones no gubernamentales que trabajan por las mujeres solicitar esa auditoría sobre el destino que el IMO le dio a los recursos públicos.
Consideró inadmisible e indignante que siendo Oaxaca un estado con un alto número de casos de violencia contra las mujeres y uno de los más pobres del país se malversen los recursos, más aún por parte del IMO, quien tendría que rendirle cuentas a la sociedad civil, pues las mujeres son las más perjudicadas con la impunidad, la corrupción y la barbarie.
Graciela Atencio conminó también a las ONG a luchar porque ese instituto se ciudadanice y lamentó haber «hecho una alianza de trabajo con quien se traiciona a sí misma, que abusa del poder y que es insensible a los preceptos y las causas sociales que dice defender».
Consideró que la forma en que Reyes Terán actuó evidencia su impostura feminista, tras ser «devorada por el patriarcado».
06/SJ/GG
