Embarazos tempranos, flagelo imparable en Guatemala

El Observatorio de Salud Reproductiva (Osar) destacó la necesidad de garantizar el acceso a una educación integral en sexualidad a niñas y adolescentes, a fin de evitar embarazos en esta población; se estima que en Guatemala uno de cada cinco niñas y niños son hijos de madres cuyas edades oscilan entre 10 y 19 años.
 
Datos de la organización destacan que sólo durante 2014 se reportaron 71 mil embarazos en adolescentes de entre 15 y 19 años, y 5 mil 100 embarazos en niñas de entre 10 y 14 años; durante este periodo se registraron también siete muertes maternas en niñas de 13 y 14 años, así como 37 decesos en adolescentes de entre 15 y 19 años.
 
Marta Julia Ruiz, consultora de Osar, recordó que los embarazos en niñas menores de 14 años son considerados violencia sexual y en el 90 por ciento de los casos el agresor es un familiar, y de éstos, el 30 por ciento es el padre de la víctima.
 
Por este tipo de delitos, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) interpuso 90 denuncias ante el Ministerio Público (MP) durante el pasado año, añadió la experta.
 
Ruiz destacó también que existe una correlación directa entre el bajo nivel de escolaridad y el número de hijas e hijos que una mujer puede tener durante la adolescencia.
 
Agregó que, de acuerdo con estadísticas de 2013, existen adolescentes de 19 años con cinco hijos y niñas de 13 años con dos hijos.
 
Una de las consecuencias de los embarazos en niñas y adolescentes es la unión temprana, afirmó Ruiz, quien recalcó que es fundamental la aprobación de leyes que prohíban el matrimonio antes de los 18 años de edad.
 
Sólo durante enero de este año se han reportado 3 mil 454 embarazos en adolescentes y 179 en niñas de 10 a 14 años; los departamentos (estados) con mayor registro de casos son Huehuetenango, Guatemala, Petén y Jutiapa, aseguró Mirna Montenegro, secretaria de Osar.
 
Montenegro señaló que para evitar esta situación es importante garantizar a las adolescentes acceso a la información y a métodos anticonceptivos; nos parece bueno que exista una ruta de atención integral, sin embargo debe existir una ruta del sector justicia, apuntó.
 
En esto último, enfatizó que el MP debe tener claro el tiempo que le tomará investigar cada caso, pues durante este proceso, que puede durar más de seis meses, la niña puede ser revictimizada cada vez que le solicitan su declaración de los hechos.
 
Este jueves 26 de febrero, Osar lanzó la segunda parte de su campaña “Protégeme 2”, que cuenta con una ruta de atención para la niña y adolescente agredida sexualmente, así como libros de enseñanza para las niñas, en los que se explica a las menores de edad cómo actuar en caso de sufrir algún tipo de acoso o intento de violencia sexual.
 
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