Eventual condena a ex dictador honra a víctimas de genocidio

La Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú destacó hoy que el juicio contra los ex generales Efraín Ríos Montt y José Rodríguez sienta un precedente en Guatemala para juzgar los delitos de genocidio y lesa humanidad ante un tribunal nacional.
 
En entrevista con Prensa Latina, la también secretaria general del Movimiento Político Winaq (ser humano integral) valoró que ahora la verdad de las víctimas del conflicto armado interno (1960-1996) pasa a ser parte de la memoria oficial.
 
Menchú señaló como muy importante la sentencia que pueda emanar de este proceso, algo que consideró que las familias y víctimas de la guerra civil guatemalteca han esperado durante muchos años.
 
“Ya lo que venga después (de la condena a Ríos Montt y Rodríguez) la historia lo dirá”, subrayó.
 
La dirigente indígena indicó que de marzo de 1982 a agosto de 1983 ocurrieron atrocidades contra mujeres, violaciones de menores y asesinatos de personas, como han probado varios testigos durante las audiencias celebradas desde el pasado 19 de marzo ante el Tribunal A de Mayor Riesgo.
 
Ese tipo de fascismo, precisó, lo hacía el Ejército contra presuntos comunistas o guerrilleros. Hoy vemos que una niña de 12 años no podía ser guerrillera, y aunque lo hubiera sido eso no era razón para que fuera violada y humillada por militares, opinó la Premio Nobel al referirse a algunos de los testimonios escuchados en la Sala de Vistas de la Corte Suprema de Justicia.
 
Con relación a quienes niegan que en Guatemala haya ocurrido genocidio, Menchú recordó que eso ya se ha dicho durante más de 30 años.
 
“Para nosotros es el mismo discurso, es normal. Lo más importante es que el tribunal reciba las pruebas, las califique y juzgue por genocidio y delitos de lesa humanidad”, remarcó.
 
Mientras tanto, el Sistema de Naciones Unidas en Guatemala saludó la voluntad del Estado guatemalteco de llevar a cabo el proceso por delitos de genocidio y de lesa humanidad cometidos por militares contra la población indígena ixil, ocurridos de 1982 a 1983 en medio del conflicto armado interno.
 
En un comunicado divulgado en esta capital, la oficina de la ONU destaca que el proceso judicial contra el ex dictador Ríos Montt y su jefe de inteligencia, el ex general Rodríguez, constituye un referente para la justicia guatemalteca en su capacidad de juzgar casos de violaciones de Derechos Humanos durante la guerra interna.
 
El Ministerio Público guatemalteco acusa a Ríos Montt y a Rodríguez como los autores intelectuales de la matanza de mil 771 indígenas ixiles de marzo de 1982 a agosto de 1983.
 
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