Pese a los compromisos mundiales por aumentar los años de escolaridad femenina, en México tres de cada 10 mujeres adolescentes en el campo mexicano no pisan las aulas de la educación media básica, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Población (Conapo).
Si bien la estadística oficial muestra que casi no hay rezagos educativos por género en la primaria, todavía no se logra que tlas niñas concluyan la secundaria de cara a los beneficios bien documentados por la ONU para su educación y su salud, puesto que la permanencia escolar retrasa el matrimonio y la maternidad.
En un comunicado, el Conapo sostiene que, sin embargo, es en el la secundaria donde se muestra el incremento de mujeres «más notable al cabo de la década pasada: un incremento en la tasa de asistencia de más de 20 puntos porcentuales de 1990 (44.3 por ciento) a 2000 (64.8 por ciento).»
Igualmente, «las desiguales oportunidades en la formación de capital humano se observan nuevamente a partir de los 12 años de edad, siendo más probable la conclusión de la educación básica (primaria y secundaria) en las ciudades que en el campo o localidades mixtas,» tanto en varones como en mujeres.
Conapo avizora que en los próximos dos años se dará el pico máximo en la demanda de educación básica, en tanto que se agudizará un notable aumento en la demanda de educación media superior –que no descenderá sino hasta 2009 y superior (18 a 24 años de edad) presión que no cederá sino hasta 2014.
2004/MR