Aunque el padrón electoral en Guatemala está integrado en su mayoría por mujeres, sólo siete de 333 municipios en el país centroamericano tendrán alcaldías femeninas, es decir 2.1 por ciento del total; ninguna es indígena.
Según la información publicada en Prensa Libre, las siete alcaldesas electas se involucraron en política, aunque para ellas pudo significar ser blanco de desprestigio personal, intimidaciones y en algunos casos amenazas.
Sin embargo, ellas continuaron con su lucha y festejaron el triunfo, en algunos casos histórico al ser las primeras mujeres en ocupar ese puesto.
A decir de Sonia Rivera, alcaldesa electa en San Benito, departamento de Petén, el reto para ella será demostrar la habilidad administrativa que poseen las mujeres con el fin de incidir en todos los partidos políticos para que se abran más espacios de participación, además de hacer conciencia en las y los ciudadanos a escuchar y estar atentos a las voces de la población femenina.
Rivera, de 34 años, dijo estar segura de que cualquier mujer que opte a un cargo de toma de decisiones tiene las mismas capacidades que un hombre, por lo que invitó a la población femenina a participar. Subrayó que su trabajo estará centrado en salud, educación y acceso al agua entubada.
En Masagua, departamento de Escuintla, la ganadora en los comicios fue Blanca Lidia Alfaro, quien indicó que desde hace 50 años el departamento no había tenido una alcaldesa en uno de sus 13 municipios, por lo que se siente honrada de haber obtenido el 53 por ciento de votos.
Según Alfaro el éxito para ganar fue que una de sus prioridades es transparentar el uso de los recursos municipales y promover entre las funcionarias y funcionarios públicos que ellos están al servicio del pueblo; otro de los proyectos de la edil electa es el fortalecimiento de la calidad educativa.
Por su parte, Rubidia Ávalos Ajú ganó la alcaldía en San Juan Bautista, departamento de Suchitepéquez, donde coordina desde hace tiempo un proyecto para ayudar a más de 600 niños, niñas y jóvenes de su comunidad, con el cual ha logrado mejorar las condiciones de ellos y sus familias.
Ávalos dijo que su gestión se centrará en manejar los fondos con transparencia y tomar en cuenta las propuestas de las comunidades, dos aspectos que son de importancia para la población.
Para la presidenta municipal electa uno de los principales obstáculos durante su campaña fue convencer de su capacidad, pues sólo cursó hasta el sexto grado de primaria.
En La Unión, departamento de Zacapa, Marianela Cordón, maestra de educación primaria, será la primera mujer en su municipio y departamento en ocupar el cargo de alcaldesa y su trabajo lo centrará en mejorar el ornato del lugar.
Élida Galindo ganó la alcaldía de El Asintal, departamento de Retalhuleu, y entre sus planes está promover proyectos de infraestructura, agua y una planta de tratamiento de aguas negras; además subrayó que demostrará que las mujeres tienen suficiente capacidad de dirección.
Mónica Milián será la primera mujer que participó en los comicios y ganó –en una contienda en la que había 12 varones– la alcaldía de Senahú, departamento de Alta Verapaz.
Milián dijo que la motivación para participar fue ver las necesidades del municipio y la vulnerabilidad de las personas ante la prepotencia de las autoridades, e indicó que la campaña fue agobiante y calificó de muy triste el acoso que sufrió por el hecho de ser mujer.
Finalmente, en Ocós, departamento de San Marcos, la actual alcaldesa, Edilma Navarijo, fue electa para un tercer periodo consecutivo. Ella fue involucrada en una red de trata de indocumentados y narcotráfico, hechos que no han podido comprobarse.
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