Siempre tendré sangre mexicana, afirma el recién naturalizado ciudadano estadounidense Federico Gutiérrez, pero mi corazón está aquí.
Él fue una de las miles de personas que apoyaron las marchas del 2006 en Chicago para la reforma migratoria y la legalización de inmigrantes indocumentados. Cuando el debate se volatizó, decidió hacerse ciudadano para poder tener influencia entre las y los legisladores y ser parte de la vida política de América.
Así, conjuntamente con los resultados del debate migratorio, el incremento de tarifas y las campañas de ciudadanización en la radio y en la televisora Univisión, despertaron en las inmigrantes residentes la idea de su naturalización, principalmente entre las y los mexicanos.
El proceso en las aplicaciones para obtener la ciudadanía se incrementó en gran medida, informa el New York Times (NYT), siendo el grupo hispano el que más aplicó.
En el 2006 fueron 702 mil 589 aplicaciones, comparado con la cifra de 2003 que fue de 463 mil 204. Este año se dio el gran salto y tan sólo en mayo aplicaron 115 mil 175 en contraste con la cifra de diciembre pasado de 65 mil 782.
El 4 de julio, menciona el diario neoyorkino, tomaron juramento cuatro mil, mil de ellos provenientes de 75 países, en una ceremonia efectuada en el Castillo de Cenicienta, en Disneylandia, Florida. En tanto en Irak fueron 325 mujeres y hombres combatientes quienes tomaron juramento.
El costo para la ciudadanización se incrementó en 69 por ciento, de 400 dólares a 675 y entrará en vigor el día 30 de este mes.
La participación de los medios de comunicación fue fundamental para que la gente hispana se movilizara y obtuviera la ciudadanía.
Así sucedió en California, donde el conductor de radio Eduardo Sotelo, mejor conocido como El Piolín, contó con el apoyo de 350 centros de iglesias y organizaciones en 22 ciudades para que en esos centros las personas solicitantes recibieran lecciones de inglés y todos los requisitos para el llenado de las formas, así como material con la historia de los Estados Unidos.
Un número importante de radioescuchas lograron dar el paso a la ciudadanización, como el mexicano Ángel Iván Álvarez, quien dijo al NYT que después del fracaso de la reforma migratoria quería poder votar y alzar mi voz por mi gente, porque no obtuvieron la suficiente ayuda. Quiero que todos salgan de las sombras, agregó.
La otra campaña informativa de gran penetración fue la que promovió Univisión, reporta el rotativo. Se obtuvieron grandes efectos, dijo Maryam Banikaram. Si eres ciudadano, tienes mejores oportunidades. Nosotros solo proporcionamos las herramientas para hacerlo realidad.
La ciudadanía estadounidense proporciona seguridad familiar y laboral, destacó por su parte la National Association of Latino Elected and Appointed Officials Educational Fund.
En tanto, el Department of Homeland Security indica que en 2005 hubo cerca de 50 mil aplicaciones, cifra que aumentó significativamente este año a 120 mil aplicaciones para la ciudadanización.
Dice el NYT que en el 2006 se dio el mayor número de aplicaciones y fueron tramitadas por personas mexicanas, lo que representa el 12 por ciento del total.
Siguieron los trámites de personas nacidas en la India con 6.8 por ciento, Filipinas con 5.8 por ciento y China con 5 por ciento.
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